La Conferencia Episcopal de El Salvador expresó su preocupación por el aumento de la violencia en este país centroamericano y condenó que el crimen organizado siga actuando con impunidad, lo cual provoca mayor pobreza, inseguridad y la emigración de miles de salvadoreños hacia otros países.
Según cifras oficiales, en 2015 se registraron 6.657 homicidios, es decir unos 18,2 diarios. Esto ha convertido a El Salvador en una de las naciones sin guerra más violentas del mundo, con un promedio de 104 homicidios por cada 100.000 habitantes.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
"Como pastores, nos sentimos impotentes pero no podemos callar. La vida de la persona es sagrada", expresaron los obispos en un mensaje publicado luego de su Asamblea Ordinaria realizada del 25 al 27 de enero.
Los prelados denunciaron que "muchas veces el armamento de los delincuentes supera al de las fuerzas encargadas de la seguridad pública y con frecuencia, estos grupos operan con impunidad". "Condenamos el perverso comercio de armas y municiones que alimenta el crimen y sigue desangrando al noble pueblo salvadoreño", expresaron.
El Episcopado también indicó que "es totalmente inaceptable que los criminales sigan enriqueciéndose a costa del sacrificio y sufrimiento de la gente honrada y trabajadora, por medio del robo y las extorsiones".
Este clima de inseguridad y violencia hace que cada año miles de salvadoreños huyan "para salvaguardar su vida, emigrando hacia otros lugares o países. Entre las consecuencias más graves están el abandono de sus bienes, la desintegración familiar y el deterioro de su propia identidad".
Sin embargo, los obispos dijeron que "ante esta difícil situación que vivimos, queremos animar a todos a poner nuestra total esperanza en Dios y a trabajar todos por la paz, haciendo efectiva la exhortación del Papa Francisco en la Jornada Mundial de la paz de este año: 'Vence la indiferencia y conquista la paz'".
La Policía de El Salvador indicó que en enero de este año ya se han registrado 738 asesinatos en el país. Las autoridades afirman que las pandillas son las principales causantes de la violencia. Se estima que estos grupos tienen unos 72.000 miembros, de los cuales 13.000 están encarcelados.