En marzo de 2015 un equipo de investigadores descubrieron los restos del famoso escritor español Miguel de Cervantes en la capilla del monasterio de las Trinitarias Descalzas de Madrid (España).
Después de que el ayuntamiento de Madrid declarara que no tenía ningún plan para organizar las visitas a la tumba del escritor de El Quijote, ni poner en valor el descubrimiento, las 13 hermanas del convento decidieron realizar ellas mismas las visitas guiadas ante la gran afluencia de visitantes.
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La entrada y el recorrido guiado son gratuitos, pero las hermanas piden una colaboración de 2 euros por persona para sufragar la limpieza y la electricidad derivados de las visitas al ilustre inquilino.
"No hemos querido abusar. (...) Antes limpiábamos nosotras. Con ese dinero nos ayuda a pagar también la luz, que ahora la tenemos encendida más tiempo", explica al diario ABC Sor Amada de Jesús, la madre superiora de las Trinitarias Descalzas.
Según afirma la religiosa, mensualmente las visitan unos 20 o 30 grupos de al menos diez personas cada uno, para ver la tumba de Cervantes en el convento ubicado en la calle Lope de Vega 28, de Madrid.
Además de los restos de Miguel de Cervantes, en el convento también está enterrada la esposa del escritor del Quijote y la hija de Lope de Vega, Sor Marcela de San Félix.
El famoso escritor sentía una gran devoción por el carisma trinitario ya que debía la vida y la libertad a esta orden que le libró de la prisión de Berbería tanto a él como a su hermano. De ahí su deseo de ser enterrado en esta capilla del convento, que en el siglo XVII era una sencilla iglesia.
Según una investigación, los restos mortales Cervantes, el escritor más famoso del Siglo de Oro español, se encuentran efectivamente en una urna funeraria en la capilla del convento de las Trinitarias de Madrid.
Un grupo de investigadores lograron identificar algunos restos de Miguel de Cervantes aunque aseguran que la comprobación a través del ADN es tremendamente complicada por el avanzado estado de descomposición.
Después del gran descubrimiento los investigadores seleccionaron los restos de Cervantes y actualmente se encuentran bajo una placa conmemorativa de piedra caliza en donde se puede leer: "Aquí yace Miguel de Cervantes Saavedra".