Por Blanca Ruiz
La archidiócesis de Barcelona acogerá el próximo sábado 16 de enero las reliquias de San Pío de Pietrelcina en el templo del Sagrado Corazón de Jesús del Tibidabo ubicado en Barcelona (España).
Con motivo de esta visita de las reliquias del Padre Pío los Jóvenes de San José han organizado una vigilia de oración desde las 21 horas hasta las 23 en donde se pedirá especialmente por el nuevo Arzobispo de Barcelona, Mons. Juan José Omella, por la Iglesia y por los frutos del Año de la Misericordia.
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Además quien lo desee podrá pasar por la Puerta Santa para obtener la indulgencia plenaria y habrá sacerdotes disponibles para confesarse.
En la vigilia también se pedirá por los enfermos y los que sufren "para que el Señor les de consuelo y alivio, y como enseñaba el Padre Pío, sepan unir su sufrimiento al del Señor en la Cruz".
También se realizará un acto de desagravio por las profanaciones "que se realizan en el mundo contra nuestro Señor Sacramentado, especialmente tendremos presente la ofensa realizada al Señor recientemente en Pamplona".
San Pío de Pietrelcina
Francesco Forgione nació en 1887 en la ciudad de Benevento (Italia). Ingresó en la Orden de los Frailes Menores Capuchinos con 15 años, donde eligió el nombre de Pío.
El día antes de entrar en el seminario tuvo una visión de Jesús con su Santísima Madre. En esta visión Jesús puso su mano en el hombro de Francisco, dándole coraje y fortaleza para seguir adelante.
Fue ordenado sacerdote el 10 de agosto de 1910 en la Catedral de Beneveto, y en febrero de ese año se estableció en San Giovanni Rotondo, donde permaneció hasta su muerte el 23 de setiembre de 1968.
Más de 100 mil personas acudieron a su funeral, ya que murió en olor de santidad. San Juan Pablo II canonizó a al Padre Pío en el año 2002 y dijo de él: "oración y caridad, esta es una síntesis sumamente concreta de la enseñanza del padre Pío, que hoy vuelve a proponerse a todos".
