En enero del 2016 el Arzobispo de Madrid (España), Mons. Carlos Osoro, explicó 5 enseñanzas que podemos aprender de Belén y animó especialmente a "ser epifanía en tiempos de necesidad de Dios", es decir, anunciar a Dios con la vida porque "la riqueza más grande es tener a Dios".
Aquí las 5 enseñanzas de Belén.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
1. El significado de la defensa de la vida
Mons. Osoro explica que es en Belén donde se aprende realmente "lo que significa defender hoy la vida y su pleno desarrollo". "La familia, la acogida de la vida y de una existencia abierta a la lógica del don de sí mismo, son la gran luz que se nos ofrece para recrear la cultura de la vida que tuvo su nacimiento precisamente allí".
2. El sentido verdadero del ser humano
En ese sentido también destacó que junto a Jesucristo en Belén se aprende que "el ser humano vale por lo que es y no por lo que tiene". Vivir entregando "concordia, solidaridad y paz" son "exigencias ineludibles de un mundo herido por el terrorismo, los desastres ecológicos y otras amenazas a la vida".
3. La verdad plena se alcanza por Jesucristo
Según dijo, en Jesucristo los términos del "amor, libertad, entrega sincera, persona, derechos de la persona o dignidad de la persona alcanzan la verdad plena, significan lo que por su naturaleza contienen" y esto se ve especialmente en Belén.
4. La referencia moral segura es siempre Jesucristo
Por eso el Prelado animó a "ser Epifanía de Dios en este mundo, ten su vida, te conocerán porque mostrarás en tu ser y vivir el verdadero carnet de identidad que nos capacita para transitar por este mundo, haciéndolo de todos, con todos y para todos", asegura el Arzobispo de Madrid.
En ese sentido apuntó que Jesucristo es "el punto seguro de referencia moral" porque "las ideas y las convicciones humanas pueden ser instrumentalizadas fácilmente". "La convivencia humana sin valores se convierte con facilidad en totalitarismo visible o encubierto, tal como nos lo demuestra la historia", dijo.
5. La riqueza más grande es tener a Dios
El Arzobispo también precisó que en la "cultura del descarte y de la indiferencia, urge hacer ver que es posible una cultura del encuentro. Los hombres podemos vivir juntos, podemos encontrarnos", apunta el Prelado quien además afirmó que "la riqueza más grande es tener a Dios".
Mons. Osoro también explicó que quien vive para sí mismo "convierte su vida en un tedio permanente y su existencia en vasija vacía", por eso explicó la importancia de abandonarse en Dios y dejarlo entrar en la vida.