La obra blasfema "Piss Christ" (Orina Cristo), del autor estadounidense Andrés Serrano, despertó gran polémica en Italia al anunciarse su exposición en la Bienal Internacional de Fotografía Photolux, en la ciudad de Lucca. Tras más de 30 mil firmas y críticas de diversos sectores políticos, los organizadores decidieron retirar la controversial obra.
El trabajo de Serrano consiste en una fotografía en la que se observa un pequeño crucifijo sumergido en un recipiente con la orina del autor.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
'Piss Christ' creates fury at Italian art show - https://t.co/jRyfyLaXKg #Italy #art pic.twitter.com/z922mDA5QE
- The Local Italy (@TheLocalItaly) noviembre 13, 2015
La exposición Photolux, patrocinada por el Ministerio de Bienes Culturales de Italia y programada para abrir del 21 de noviembre al 13 de diciembre, pretendía incluir la fotografía de Serrano en el marco de su tema de este año: "Sacro y profano".
Fabio Rampelli, diputado italiano por la Fratelli d'Italia-Alianza Nacional, calificó la exposición de "abominable", y lamentó que el Ministerio de Bienes Culturales de Italia patrocine "una ofensa al sentimiento religioso de los italianos".
"Estamos en un estado laico, pero el sentimiento religioso no puede ser objeto de ofensa", señaló Rampelli.
El periodista italiano Mario Adinolfi criticó por su parte que al mismo tiempo que se admiten muestras blasfemas como esta, en una escuela de Florencia se impidió recientemente a unos niños presentar la muestra "Belleza divina" debido a que "perturba a los no católicos".
Por su parte, la plataforma CitizenGO reunió más de 32 mil firmas pidiendo a Franceschini que retire el patrocinio del ministerio al evento con la exposición blasfema.
Aunque con desgano, el presidente y director artístico de Photolux, Enrico Stefanelli, anunció el 15 de noviembre en un comunicado que la obra blasfema "Piss Christ" no formaría parte de la exposición, pues es "consciente de que esta fotografía toca tan fuertemente los sentimientos de muchas personas y muchos cristianos".