Por Blanca Ruiz
El domingo 18 de octubre en el Vaticano el Papa Francisco canonizará a la Madre María de la Purísima de la Congregación de las Hermanas de la Cruz de España. Francisco José Carretero, más conocido como Carre, es quien ha hecho posible esta canonización después de estar 25 minutos en paro cardiorrespiratorio y 12 días en coma. "Estoy vivo de milagro", asegura.
Carre era un joven normal, tenía una cardiopatía que controlaba gracias a la medicación. Sin embargo el 23 de septiembre de 2012 sufrió un infarto. "Tuve un paro cardiorrespiratorio y sin oxígeno durante 25 minutos y después en coma unos doce días", cuenta Carre a ACI Prensa y reconoce que: "Estoy vivo de milagro".
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"El que menos sufrí fui yo que estaba en coma, porque mi familia, mi novia, mis amigos lo pasaron muy mal", asegura. En esa durísima situación, unos amigos de Carre –hermanos de la cofradía de la Esperanza Macarena de Sevilla- decidieron comenzar a rezar una novena a la Madre María de la Purísima, que había sido superiora de las Hermanas de la Cruz, una congregación muy conocida en Sevilla.
El protagonista del milagro explica que en ese momento ya habían firmado todo los papeles para que los llevaran a la unidad de cuidados paliativos "porque los médicos dijeron que todo lo que ya habían hecho todo lo que podían por mi. Hasta mi novia había firmado para donar mis órganos", asegura.
Pero lo que parecía una muerte inminente se convirtió en un milagro en toda regla porque según cuenta Carre a ACI Prensa: "El último día de la novena desperté del coma".
Incluso hay más. "La madrugada anterior a que despertara, una de las religiosas de las Hermanas de la Cruz estaba muy enferma y antes de que muriera las otras monjas le dijeron: "Cuando llegue al cielo pídale a la Madre María de la Purísima por la recuperación de Carre". Por la noche la hermana murió y yo desperté a la mañana siguiente", cuenta a ACI Prensa.
Según explica Carre, él siempre ha tenido una gran devoción a Sor Ángela de la Cruz, la fundadora de la congregación de las Hermanas de la Cruz de la que la Madre María de la Purísima fue su primera sucesora. "Siempre le hemos tenido devoción a Sor Ángela de la Cruz y desde mi curación, lógicamente también le rezamos mucho a la Madre María de la Purísima".
Unos seis meses después de que le dieran el alta y una vez recuperado del coma tuvo que pasar la investigación del tribunal médico. "Todos mis familiares contaron lo mismo, que habían pedido a la Madre María Purísima por mi curación. Y que mi madre era la única que conservaba la esperanza de que me recuperara", explica. Tras el estudio médico su caso pasó al Vaticano y ha hecho que tan sólo cuatro años después de la beatificación de la Madre María Purísima pueda ser canonizada. Se trata de uno de los procesos más rápidos de la historia.
Carre asistirá junto con su novia a la canonización en Roma y llevará colgada la medalla de la Virgen de la Esperanza Macarena. Aunque asegura que está feliz de poder asistir a ese gran acontecimiento, precisa que no está acostumbrado "al revuelo que se ha formado". "Parece como si yo fuera el santo y la verdad es que de santo tengo más bien poco", reconoce. Pero asegura de manera firme que "todo lo que esté en mi mano hacer por las Hermanas de la Cruz yo lo haré".
Dos santas de las Hermanas de la Cruz
San Juan Pablo II canonizó a la Santa Ángela de la Cruz en mayo de 2003. Sor Ángela es la fundadora de la Congregación de las Hermanas de la Cruz.
La Madre María de la Purísima es la sucesora de Santa Ángela de la Cruz. Su proceso de beatificación se abrió tan sólo siete meses después de su muerte en el año 2004. El primer milagro que se estudió fue la curación en el año 2006 de Ana María, una niña de La Palma del Condado, Sevilla (España) que fue curada por su intercesión. Tres años después, en 2009, fue nombrada venerable y en diciembre de ese mismo año se aprobó el milagro de su beatificación. La beatificación tuvo lugar en diciembre de 2010 en Sevilla y se trasladó la imagen de la Esperanza Macarena al lugar donde tuvo lugar la celebración. Antes de cumplirse doce años de su muerte.
Hasta ahora la congregación cuenta con dos santas (Sor Ángela y la Madre María de la Purísima), pero el P. Torres Padilla, cofundador con Santa Ángela de las Hermanas de la Cruz también tiene abierto su proceso de beatificación.
La canonización de la Madre María de la Purísima se realizará el 18 de octubre en la Plaza de San Pedro a las 10 de la mañana hora de Roma.
