La policía china rescató este domingo a una bebé recién nacida que fue abandonada en un retrete de un baño público en Beijing (China), gracias a la alerta lanzada por los residentes que escucharon el llanto de la menor.
En declaraciones a la prensa local, el jefe de la policía local, Qian Feng, dijo que la bebé "tenía la cabeza boca abajo y el cuerpo estaba cayendo en el desagüe. Podríamos ver vagamente solo sus pies".
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
Al principio los efectivos pensaron en desmantelar el inodoro, pero tomaría demasiado tiempo y la bebé seguía llorando.
"Ella seguía llorando. Miré de nuevo, y pensé que deberíamos tratar de sacarla incluso si la posibilidad podría ser pequeña", señaló.
El rescate de la bebé fue grabado por otro efectivo policial. Luego de ser sacada, la gente que estaba cerca ayudó a la policía a abrigar a la pequeña, quien fue llevada al hospital. Ayer lunes se informó que la niña está estable y que se intenta ubicar a los padres.
En China, desde hace décadas se vive bajo la política del hijo único, una medida extrema de control natal que sanciona a los padres que tienen más de un hijo, obligándolos a abortar y con enormes multas si el hijo llega a nacer.
No es un caso único
Hace un poco más de dos meses otro caso similar conmovió a la sociedad, cuando la policía de Guangxi (China), rescató con vida a un bebé que había sido enterrado en una tumba poco profunda en una colina.
El rescate fue publicado en los medios el 14 de mayo y, según las investigaciones de las autoridades, el niño había sido abandonado porque nació con labio leporino y defectos congénitos.
La agencia estatal de noticias Xinhua informó que el menor nació el 20 de abril y fue dado de alta cuatro días después de recibir tratamiento por fiebre alta. En China miles de bebés con defectos de nacimiento son abandonados.
Así, según Xinhua, el 24 de abril la familia contrató a un hombre por 290 dólares para deshacerse del bebé. Este lo dejó en una caja a la intemperie para que muriera y dos días después lo enterró.
Sin embargo, una mujer escuchó el llanto y con ayuda de los pobladores y la policía, rescataron al bebé y lo llevaron al hospital.
La policía arrestó a los padres, las dos abuelas y al hombre que lo enterró. Los padres fueron puestos en libertad bajo fianza y quieren la custodia del niño. Sin embargo, las autoridades locales dicen que el bebé podría ser puesto bajo la protección de servicios sociales.