Cada 4,1 segundos hay un nuevo refugiado o desplazado interno en el mundo y alrededor de 51,2 millones de personas han sido forzadas a abandonar su país. Durante el año 2014, los 28 estados miembros de la Unión Europea registraron 57.800 solicitudes de asilo, un 44 por ciento más que en 2013.
Actualmente hay más personas refugiadas que en cualquier otro momento desde la Segunda Guerra Mundial. Ante esta situación la ONG española Desarrollo y Asistencia en colaboración con Rescate Internacional ha presentado su campaña 'befriending' que promueve la inclusión de estas personas que necesitan protección internacional a través de la acción de la sociedad civil y el voluntariado.
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Según explicó David Palomo, director de Rescate Internacional en la presentación de la campaña 'befriending' "las personas que llegan a un país como refugiadas conllevan terribles cargas psicológicas y físicas que dificultan su integración".
Según precisó Palomo el objetivo es unir a 20 personas con necesidades de protección internacional con voluntarios mentores que les ayuden a integrarse en la sociedad a través de la creación de vínculos de apoyo.
Ese es el caso de Jesús Teijelo, voluntario de esta asociación y que participa en el programa Befriending desde hace algunos meses. Actualmente acompaña a Bradislav, un joven ucraniano que vive en el Centro de Acogida al Refugiado en Alcobendas (Madrid).
"Aunque inicialmente suelen ir dos voluntarios con cada refugiado, en mi caso, por falta de personal fui yo solo con Vladislav, un joven de 40 años que huyó de Ucrania", explica el voluntario.
"Nos vemos una vez a la semana, normalmente vamos al campo a pasear que es lo que más le gusta. Mi cometido es portarle ocio y una vida diferente a la que lleva entre semana, apoyarle a la incorporación a la sociedad, porque el tiene muchas ganas de formar parte de la sociedad española".
Ucrania, Líbano, Nigeria, Palestina, El Salvador y Guinea Conakry son los principales países de donde vienen los refugiados que forman parte de Befriending.
El Programa Befriending pretende proporcionar a la persona refugiada "un amigo, una persona que esté dispuesta a dedicar su tiempo para ayudarle a su integración, a crear vínculos de los que puede carecer e introducirle en una red de apoyo social".
Mar Garrido, directora de Estudios y proyectos de la Fundación Desarrollo y Asistencia apuntó que "el proceso de adaptación de las personas refugiadas en un nuevo entorno social y cultural, les obliga a enfrentarse a situaciones en la que las herramientas que les fueron útiles en sus países de origen, muchas veces ya no les sirven".
Como es el caso de Karen Herrera, una mujer refugiada en España procedente de El Salvador y que participa en el proyecto. Según afirmó "cuando tu día a día consiste en visitas a psicólogos y abogados, y vives el peso de la soledad por lo que has dejado atrás, el programa Befriending y sus voluntarias te ayudan a dejar a un lado su problema y te animan a seguir adelante".
Durante el pasado año, España recibió 5.900 solicitudes de asilo, pero se concedieron tan sólo 1.600. Según destacó David Palomo, "es importante además dotar a la sociedad de recursos para que las personas refugiadas puedan ejercer sus derechos, y a día de hoy, estos recursos están siendo insuficientes".