Sor Diana Momeka, de las hermanas dominicas de Santa Caterina de Siena, tenía planeado viajar de Irak a los Estados Unidos para relatar su trabajo con los cristianos perseguidos, sin embargo, funcionarios del gobierno estadounidense le han negado la visa porque –según ellos–, la verdadera intención de la religiosa es quedarse como una inmigrante ilegal.
La historia fue revelada por la revista estadounidense "National Review" de Ann Shea, directora del Hudson Institute Center for Religious Freedom, quien, a pesar de los reclamos del Departamento de Estado de Estados Unidos, ha confirmado su información punto por punto, mostrando además algunas contradicciones en el trabajo del consulado estadounidense de Erbil, capital del Kurdistán iraquí.
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Sor Momeka debía viajar a Washington DC junto a una delegación formada por minorías religiosas, entre ellos yazidís y musulmanes chiitas. A todos se les entregó la visa para participar en los encuentros oficiales, menos a la hermana Diana Momeka, la única cristiana proveniente de Irak.
Shea informó que vio la carta que rechaza la solicitud de la religiosa. Según el texto, la hermana "no fue capaz de demostrar que las actividades que intenta practicar en los Estados Unidos van en línea con la clasificación de la visa".
En conversación telefónica, la religiosa dijo a Shea que fue Christopher Patch, funcionario del consulado, quien le dijo que el documento fue negado porque ella es una "desplazada interna".
Es decir, el consulado le acusó de querer engañar al decir que solo quería visitar Washington DC, y que en secreto su intención era quedarse como inmigrante ilegal o pidiendo asilo político.
El viaje debía ser a mediados de mayo y durar una semana. El programa de la religiosa consistía en encuentros con los comités de relaciones exteriores del Senado y la Cámara de Representantes, con varias ONG en Washington DC, miembros del Departamento de Estado y USAID.
Sor Momeka sustentó su pedido con varios documentos, entre ellos una carta de su priora, Sor María Hana; un documento que prueba su compromiso con el Babel College de Filosofía y Teología de Erbil para enseñar en el año académico 2015-2016; la invitación de sus patrocinadores y el apoyo de la representante Anna Eshoo.
Sin embargo, le quedó adherido el estatus de "desplazada" de cuando tuvo que dejar la ciudad iraquí de Qaraqosh –donde vivía y enseñaba– en agosto de 2014, bajo las amenazas del Estado Islámico (ISIS).
Durante este tiempo la hermana se ha consolidado como defensora de la libertad religiosa y de los derechos humanos. Esto le habría al menos garantizado la consideración como "líder religioso", según el Quadriennal Diplomacy and Development Review del Departamento de Estado.
Después de la publicación del artículo, el Departamento de Estado pidió a Ann Shea cambiar su versión, porque Christopher Patch no habría "hecho alguna entrevista a Sor Diana Momeka para la concesión de la visa". Shea replicó que la conversación no fue nunca definida como una entrevista para obtener el visado.
Shea añade que Sor Momeka sería parte de una delegación en la cual hay otras muchas minorías. Así, "si el estatus de 'desplazada' de Sor Diana era el problema, ¿por qué en octubre pasado los otros desplazados yazidís obtuvieron la visa?", cuestionó.
Traducido por Eduardo Berdejo