El Arzobispo de Kirkuk (Irak), Mons. Yousif Thomas Mirkis, participó este fin de semana en el Congreso "Todos somos Nazarenos", donde advirtió que el Estado Islámico (ISIS o Daesh) es "como un iceberg" que muestra una parte de un problema mucho más profundo y destacó la importancia de llevar esperanza a los refugiados de la persecución contra los cristianos que ha emprendido el grupo terrorista.
En diálogo con ACI Prena, Mons. Yousif Thomas Mirkis señaló que en Irak "somos cristianos desde hace más de 2 mil años, fue el apóstol Santo Tomás quien nos evangelizó". Sin embargo, en algunas zonas de Irak la persecución de ISIS es constante, por lo que algunas estadísticas apuntan a que en diez años no quedarán cristianos en el país.
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Mons. Mirkis advirtió que el Estado Islámico es "como un iceberg, sólo vemos el 10 por ciento que está sobre el agua, pero hay mucho más debajo".
El Arzobispo explicó que el origen de este grupo terrorista está motivado por un amplio conjunto de factores, tanto nuevos como antiguos, pero tienen especial importancia "cómo vives la religión, cómo interpretas tus libros sagrados y tu percepción de la realidad y de la sociedad en su conjunto y si aceptas las diferencias que existen en ella".
Por esto, el Arzobispo considera que el trabajo con los refugiados es primordial. "Trabajamos para conseguirles comida, casa, medicinas, electricidad… pero también es muy importante darles esperanza, sobre todo a los niños. Por eso hice un grupo de teatro en el que preparan obras y después las representan. La última ha sido 'Canto aunque estoy triste'", indicó.
Mons. Mirkis explicó que no se trata "de darles falsas esperanzas, porque no sabemos si mañana será peor, pero lo que es importante es fortalecerles y ayudarles a pensar".
"Me ha sorprendido mucho porque en mi diócesis todos y cada uno han ayudado de alguna manera a los refugiados, unos ofreciendo una casa que tenían libre, otros dando comida, otros fueron a repartir botellas de agua a los puntos de control", destacó.
En ese intento de sembrar esperanza el Arzobispo explicó que "en Navidad, Pascua o por su primera comunión los niños tienen un pequeño regalo que les damos, pero tiene que ser un regalo que les ayude en algo. Los niños son el punto principal de ayuda en la diócesis de Kirkuk".
Por eso, en la arquidiócesis se ha abierto una guardería que mientras el año pasado atendía 60 niños, en este curso escolar el número se ha duplicado, ya que han acogido a los niños refugiados y ahora tienen casi 130 alumnos.
Mons. Mirkis también recordó la presión de ISIS contra las mujeres, subrayando que "los miembros del ISIS no solo persiguen a las minorías cristianas y yazidíes, sino también a las mujeres. De los 8 millones de personas que están bajo el mandato de Daesh, al menos la mitad son mujeres a las que tienen relegadas".
"Recuerdo que mataron dos doctoras por no querer ponerse el burka completo en el hospital. Ellas dijeron que no lo harían porque no podrían trabajar con él y por negarse las mataron", señaló.
Mons. Mirkis subrayó la importancia de la educación, y ha creado una escuela de Ciencias Sociales porque, según explicó a ACI Prensa, piensa que es necesaria una élite preparada "para curar las enfermedades de nuestra sociedad".
"Necesitamos mucho tiempo y esfuerzo para curar nuestra memoria", aseguró.
"El objetivo no es solo defenderse de un enemigo que viene sino cómo ayudar a tu enemigo a que se convierta a la paz y la no violencia", señaló.