Los cristianos perseguidos, así como la trata de personas, la pena de muerte y la importancia de la mujer son algunos de los temas que servirán para las meditaciones del Via Crucis del Papa Francisco el próximo Viernes Santo, 3 de abril.
Como es tradición, el Pontífice se desplazará hasta las inmediaciones del Coliseo, en el centro de Roma, desde donde seguirá las 14 estaciones cuyos temas escogidos para este año están a cargo del Obispo Emérito de la diócesis italiana de Novara, Mons. Renato Corti.
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Los textos preparados por el Prelado llevan por título "La Cruz, vértice luminoso del amor de Dios que nos custodia" y "Llamados también a ser nosotros custodios por amor".
"Queremos participar de este Vía Crucis en profunda intimidad con Jesús. Atentos a cuanto está escrito en los Evangelios, serán acogidos con discreción algunos sentimientos y pensamientos que han podido habitar en la mente y en el corazón de Jesús en esa hora de prueba", dice el texto que leerá el lector como monición a la celebración.
"Al mismo tiempo, nos dejaremos interpelar por algunas situaciones de vida que caracterizan –en el bien y en el mal- nuestros días. Expresaremos así una resonancia que diga nuestro deseo de dar cualquier paso que imite a Nuestro Señor Jesucristo en su pasión".
Durante la celebración, se leerá por ejemplo un pequeño texto del cristiano pakistaní Shahbaz Bhatti, que fuera ministro para las minorías y que fue asesinado por un grupo de hombres armados el 2 de marzo de 2011.
En la VI estación, en la que Verónica enjuga el rostro de Cristo, se meditará sobre el genio femenino.