Al término de la Audiencia General de este miércoles, el Papa Francisco llamó a la comunidad internacional a encontrar soluciones pacíficas a la crisis en Libia, país que se encuentra en guerra civil desde la caída de Muamar al Gadafi en 2011 y donde 21 cristianos egipcios fueron decapitados por el Estado Islámico (ISIS).
Secuestrados 35 egipcios en Libia tras los bombardeos de Egipto contra el EI http://t.co/58wBYROFZ3 pic.twitter.com/108vITaKhp
- Europa Press (@europapress) febrero 17, 2015
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"Recemos por la paz en Oriente Medio y en el norte de África, recordando a todos los fallecidos, heridos y refugiados. Que la Comunidad Internacional pueda encontrar soluciones pacíficas a las difíciles situaciones en Libia", expresó el Santo Padre.
Francisco también invitó a orar "por nuestros hermanos egipcios que hace tres días fueron asesinados en Libia por el mero hecho de ser cristianos. El Señor les acoja en su casa y dé consuelo a sus familias y a su comunidad".
El asesinato de los 21 cristianos coptos ortodoxos ha puesto en alerta a la comunidad internacional, en especial Italia, cuya capital Roma está en la mira del ISIS, tal como señalan los fundamentalistas en el video difundido el domingo.
Asimismo, tras la decapitación de los coptos, Egipto ha lanzado ataques aéreos contra las posiciones yihadistas en Libia. Además, ha solicitado al Consejo de Seguridad de la ONU tomar acciones contra los fundamentalistas.
Por su parte, España, Estados Unidos, Alemania, Francia, Italia y Reino Unido emitieron hoy un comunicado conjunto en el que piden seguir buscando una "solución política" al conflicto en Libia, apoyando un "Gobierno de unidad nacional".
Actualmente existen dos gobiernos en Libia, uno liderado por el general Halifa Heftar desde Tobruk –en el este del país–, y que es reconocido a nivel internacional; y otro autoproclamado en Trípoli, amparado por la milicia "Farj Libia" que posee también miembros en Misrata y que tiene afinidad con grupos yihadistas como Ansar al-Sharía, que se ha unido al Estado Islámico.