Un grupo de vándalos ingresó la madrugada del 8 de febrero a la iglesia de San Ildefonso en Tepeji del Río de Ocampo, estado de Hidalgo (México), y al no encontrar dinero para robar, destruyeron y prendieron fuego al templo católico.
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En declaraciones recogidas por Azteca Noticias, un feligrés indicó que los delincuentes ingresaron con el propósito de "agarrar la limosna, pero no encontraron nada y quemaron el altar de la iglesia", así como "las biblias y unas cosas religiosas de la iglesia".
Esta es la segunda ocasión en el que el templo católico es víctima del vandalismo, indicó, pues en la primera ocasión "se metieron a robar los tanques de gas de la iglesia, y luego se metieron y sacaron la limosna del Cristo de la entrada".
Por su parte, el P. Bernardo Guizar Sahagún, párroco del lugar, explicó que los vándalos "hicieron una lumbre en el bautisterio con unas cosas que había ahí, unos lienzos, unas cosas donde a veces se pone un mensaje".
"Luego, con el misal y con otros libros y algunas actas prendieron otro fuego", dijo, señalando que "afortunadamente no se quemó la imagen del patrón".
Los pobladores, en su mayoría de procedencia indígena, denunciaron el ataque ante las autoridades locales, y formaron un comité propio para investigar el caso.