El Papa Francisco envió este martes un mensaje al Prepósito General de la Compañía de Jesús (jesuitas), P. Adolfo Nicolás Pachón, para expresar sus condolencias por la muerte del Cardenal Karl Josef Becker, purpurado alemán que no era obispo.
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Il cordoglio del Papa per la morte di Karl Joseph Becker - http://t.co/ifrLccLVDe pic.twitter.com/uN1LQwZyYU
- Korazym.org (@KorazymOrg) febrero 10, 2015"Elevo fervientes oraciones al Señor para que, por intercesión de la Virgen Santa y de San Ignacio de Loyola, quiera donar al difunto cardenal el premio eterno prometido a sus fieles discípulos y de corazón envío a usted y a cuantos lo han conocido, apreciando las cualidades de mente y de corazón, la reconfortante bendición apostólica".
Un cardenal que no era obispo
El Cardenal Becker nació en Colonia (Alemania) el 18 de abril de 1928. Era jesuita desde 1948 y sacerdote desde 1958. Fue creado cardenal por Benedicto XVI en febrero de 2012. Sin embargo, antes de su creación pidió ser dispensado de la ordenación episcopal debido a su avanzada edad. Fue asignado al orden cardenalicio de los diáconos con la diaconía de la iglesia de San Julián Mártir.
El Cardenal Becker llegó al cardenalato con más de 80 años y por tanto sin derecho a participar en el cónclave que eligió al Papa Francisco. Tampoco participó del consistorio en el que fue creado cardenal, debido a la enfermedad que lo aquejaba entonces.
El colegio cardenalicio queda ahora con cuatro cardenales jesuitas. Ellos son Roberto Tucci, de 93 años; Albert Vanhoye, de 91; Ján Chryzostom Korec, también de 91; y Julius Riyadi Darmaatmadja, de 80 años. Todos ellos por la edad excluidos de un eventual cónclave aunque el eslovaco y el indonesio cuando fueron creados eran electores.