Este miércoles 14 de enero el Papa Francisco realizará una oración en el Santuario de Nuestra Señora de Madhu, Sri Lanka, considerado el lugar católico más sagrado del país. En su interior se conserva una imagen de la Virgen con el Niño, que junto a los fieles también vivió persecución y fue signo de reconciliación.

La Iglesia de Nuestra Señora de Madhu está ubicado en el distrito de Mannar de Sri Lanka, cerca de la costa norte occidental. En la década del 1600, cuando los holandeses arribaron en Sri Lanka y anularon a los portugueses, se comenzó a perseguir a los católicos con la finalidad de que se difunda el protestantismo.

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Los católicos se mudaban a otras zonas del país buscando escapar de la persecución. Un grupo de ellos que huían de Mantai, pueblo cerca de Mannar y Jaffna en el norte del país, se trasladó a un lugar seguro en Madhu, llevándose consigo la imagen de su iglesia.

En Madhu construyeron un nuevo santuario para colocar la estatua. Como consecuencia de la renovación que vivieron los católicos con ayuda de los misioneros, como el P. José Vaz y otros presbíteros del Oratorio en medio de la persecución holandesa, el Santuario comenzó poco a poco a atraer peregrinos y la estatua comenzó a tener fama de milagrosa.

El Obispo Bonjean inició la construcción de la iglesia de Madhu a mediados del 1800. Mientras que en el 1870, el nuevo Obispo inauguró una fiesta anual que se conmemoraba cada mes de julio y que luego se trasladó a agosto. La fiesta celebra la Asunción de la Virgen María y atrae multitudes de devotos. La imagen fue coronada oficialmente por un legado pontificio del Papa Pío XI en 1924.

En la guerra civil de Sri Lanka, la Iglesia quedó dañada ya que estaba situada en el centro de la zona del conflicto. La peregrinación a la ermita se vio interrumpida durante el periodo de 1999-2008. En 2008 la estatua de Nuestra Señora de Madhu fue sacada de la Iglesia por protección y no fue devuelta hasta que se pudo garantizar la seguridad.

Durante la guerra, la iglesia de Madhu y sus alrededores han servido como lugar de refugio. La imagen sagrada, además, recorrió varias parroquias de Sri Lanka en varias ocasiones durante el conflicto para que los católicos saquen fuerzas para continuar orando por la paz.

En el 2009, el mismo año después que terminó la guerra civil de 30 años, los peregrinos pudieron volver a la fiesta de agosto en la iglesia. El Arzobispo de Colombo, Cardenal Malcolm Ranjith acogió a cerca de 500.000 peregrinos que llegaron al santuario.

En la actualidad, el Santuario mariano es cada vez más accesible la mejora de carreteras y facilidades proporcionadas a los peregrinos.

Más información en: https://www.popefrancissrilanka.com/shrine-of-our-lady-of-madhu/