Shahbaz Gurmani es un abogado comprometido con la defensa de los acusados por la ley de blasfemia en Pakistán, sin embargo, esta labor le ha costado ser amenazado por yihadistas del Estado Islámico (ISIS) que se han infiltrado en el país para iniciar una campaña contra estos abogados defensores.
Así lo informó Dawn News Tv en una nota reproducida por el diario italiano Avvenire. El abogado, que ve los casos de Junaid Hafeez e Khalil Qadri, recibió una carta firmada por los yihadistas que le advierten que si no renuncia, estará poniendo "en juego su vida".
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El miércoles pasado, Gurmani vio a un desconocido parado delante de su casa en Multan (Punjab). Al día siguiente "sentí el rumor del motor de una moto fuera del portón de mi casa y cuando salí, no había nadie, pero encontré la carta", indicó.
Entre otras cosas, el texto de la carta firmada por ISIS dice "¿No has sabido lo que le sucedió a Rashid Rehman (exabogado de Hafeez asesinado con arma de fuego)? Si no abandonas la defensa serás decapitado".
"Estamos bien al corriente de los lugares que visitas. No Siamo ben al corrente dei posti che visiti. Nunca perdemos nuestros objetivos", añaden los yihadistas.
Sin embargo, Gurmani aseguró que no teme a las amenazas y ha presentado una denuncia a la policía. "Si no me dan agentes para mi seguridad, me los procuraré por mi cuenta", afirmó.
El caso más emblemático de los abusos cometidos bajo la ley de blasfemia es Asia Bibi, la mujer católica condenada a muerte y que ahora espera el fallo de la Corte Suprema.
Asimismo, el 4 de noviembre la organización pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN) presentó un informe sobre la libertad religiosa en el mundo, en el que se señala que estas leyes de blasfemia "limitan, en la práctica, la libertad de religión y expresión. Profanar el Corán o insultar al profeta son delitos que se castigan con penas de cárcel o, incluso, con la muerte".
"En la vida diaria, sin embargo, estas leyes se utilizan con frecuencia como instrumento de persecución contra las minorías religiosas. A pesar de las llamadas realizadas a lo largo de muchos años para que se deroguen estas leyes, ningún partido político, ni Gobierno se ha atrevido a tocarlas", indica el texto.