Por Blanca Ruiz
Jorge Fernández Díaz, Ministro del Interior del gobierno de España ha confirmado que "se han detenido y puesto a disposición judicial a cuatro personas por parte de la policía" relacionados con el caso de supuestos abusos sexuales que tuvieron lugar en Granada hace al menos una década.
Los detenidos son tres sacerdotes y un laico. Uno de los sacerdotes era el párroco de San Juan María Vianney en el barrio obrero del Zaidín en Granada y otro trabajaba en el tribunal eclesiástico del arzobispado de la diócesis.
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A pesar de que el Ministro ha renunciado a hacer ninguna declaración al respecto sí que se ha precisado que "la más alta jerarquía de la Iglesia, el Papa Francisco ha sido el más beligerante para que este caso saliera a la luz. Nadie puede poner en cuestión que Juan Pablo II, Benedicto XVI y ahora el Papa Francisco están siendo absolutamente beligerantes para arrancar del seno de la Iglesia este tipo de comportamientos que nos conmueven y nos hace un daño muy grande".
En ese sentido Fernández Díaz ha subrayado que "es verdad que estas conductas no sólo se producen en el seno de la Iglesia, pero ahora estamos hablando de ellas. La Iglesia está poniendo todo de su parte para que se erradiquen y ojalá se terminen también en toda la sociedad".
No se descartan que en los próximos días tenga lugar más detenciones.
A pesar de que la investigación está bajo secreto de sumario la Fiscalía de Granada ha advertido sobre las consecuencias muy prejudiciales que tendría el quebrantamiento del secreto de sumario ya que la investigación podría verse "gravemente comprometida" por las filtraciones por lo que desde la Fiscalía aseguran que no proporcionarán "datos ni comentarios" al respecto.
Sobre este caso el Arzobispo de Granada, Mons. Javier Martínez, ha declarado que actuó "escrupulosamente" de acuerdo al protocolo que tiene la Iglesia para afrontar este tipo de hechos. Además, el día de ayer durante la Misa por la Solemnidad de Cristo Rey, se postró ante el altar de la Catedral junto a un grupo de sacerdotes para pedir perdón por los pecados de los pastores de la Iglesia.
Hace unos días una fuente del Vaticano confirmó a ACI Prensa que el mismo Papa Francisco llamó por teléfono al joven víctima en este caso y lo alentó a demandar a los culpables para erradicar "el escándalo de la pedofilia".
