Las autoridades federales arrestaron a un hombre con problemas mentales que admitió haber destruido con su auto un monumento a los Diez Mandamientos en las afueras del edificio del Capitolio en Oklahoma, Estados Unidos.
CNN informó que hace unos días el hombre fue detenido tras presentarse en un edificio federal en Oklahoma, haciendo comentarios despectivos sobre el presidente Barack Obama. El sujeto dijo a las autoridades que primero orinó sobre el monumento para luego destruirlo con su vehículo porque "Satanás me ordenó hacerlo".
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El monumento de 1,80 metros fue erigido en el 2012 con aprobación de la legislatura de Oklahoma.
La gobernadora Mary Fallin calificó el hecho como "horrible" y se ofreció para recaudar fondos para su restauración.
Además de condenar los hechos, el grupo Satanic Temple solicitó a las autoridades la posibilidad de colocar un monumento al demonio "junto al de los Diez Mandamientos" cuando esté restaurado, "como testamento de la libertad religiosa y la tolerancia en América".
Como se recuerda, Oklahoma estuvo en el ojo de la tormenta en el mes de septiembre cuando un grupo satánico organizó una "misa negra" en el Salón Musical del Centro Cívico de Oklahoma City.
Este evento generó una amplia respuesta de manifestaciones pacíficas, horas santas y oraciones por parte de los católicos, encabezados por el Arzobispo de Oklahoma City, Mons. Paul Coakle, que al presidir una Hora Santa y procesión eucarística, dijo que "estamos reunidos como testigos de la esperanza en un tiempo en la que la oscuridad parece estar ganando terreno, tanto aquí como alrededor del mundo".