El Papa Francisco celebrará una Misa con motivo de la fiesta de Todos los Santos el próximo sábado 1 de noviembre, en el campo santo más antiguo y extenso de Roma, el Cementerio Monumental "del Verano".
Según informó la diócesis de Roma, la ceremonia comenzará a las 4:00 p.m. hora local y concluirá con una pausa de oración por los difuntos y la bendición apostólica de las tumbas.
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El año pasado el Papa Francisco celebró esta fiesta en este mismo cementerio, rezó por las víctimas y sobrevivientes de las distintas tragedias que sufren los inmigrantes en el mundo y afirmó que esta la fiesta "es un día de esperanza".
Debido a su patrimonio artístico, el cementerio es considerado también un museo al aire libre sin igual por la cantidad y la particularidad de los testimonios de los sepulcros, de un valor inestimable por su perfil histórico, artístico, cultural y espiritual. En efecto, en este cementerio se mezclan las esculturas y los retratos de los difuntos en los panteones de las familias más importantes de Roma del siglo XIX y XX.
El cementerio fue fundado durante la época napoleónica, 1805-1814, y es fruto del Edicto de Saint-Cloud, que imponía que las sepulturas se ubicasen fuera de las murallas de la ciudad y no en el interior o cerca de las iglesias. Su proyecto fue confiado a Giuseppe Valadier entre 1807 y 1812, y fue culminado por Virginio Vespignani.
A su entrada principal, el cementerio acoge a los fieles con cuatro impresionantes estatuas que representan la meditación, esperanza, caridad y silencio. El Cementerio del Verano debe su nombre, Verano, al antiguo campo que perteneció a los "Verani", una antigua familia de senadores.
Junto al Pontífice concelebrarán la Misa el Vicario General para la diócesis de Roma, Cardenal Agostino Vallini; el Vicegerente de la misma, Arzobispo Filippo Iannone; el Obispo Auxiliar para el sector centro de la ciudad, Mons. Matteo Zuppi; el Obispo vicario del Capítulo Lateranense, Mons. Luca Brandolini; y el párroco de la Basílica San Lorenzo Extra Muros, Padre Armando Ambrosi.