El Ministerio Público de Bolivia estableció que "no existe responsabilidad alguna" de los cuatro religiosos acusados del robo perpetrado en abril del año pasado en el Santuario de la Virgen de Copacabana, informó el Secretario de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), Mons. Eugenio Scarpelli.
En un comunicado del 29 de julio, el Prelado se refirió al caso del P. René Vargas, rector del Santuario de Copacabana; el P. Elvio Frías, maestro de los estudiantes franciscanos; el hermano Lorenzo Vabkerti, ecónomo de la Fraternidad del Santuario, y del sacristán Lázaro Pomacusi.
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Mons. Scarpelli reconoció el trabajo realizado por la Fiscalía y "la valentía de hacer prevalecer la verdad frente a las presiones y amenazas existentes". Sin embargo, criticó que se haya violado los derechos fundamentales de los cuatro acusados, quienes fueron perseguidos y calumniados constantemente "en los medios de comunicación, detenidas y cauteladas injustamente, con un daño moral irreversible".
"Pedimos a los religiosos y fieles que reconozcan en estas 'señales' el sacrificio que conlleva el camino de la fe. No desfallezcan porque el amor del Padre está siempre con nosotros y nos anima a seguir adelante", expresó.
En el comunicado, Mons. Scarpelli también lamentó que "la justicia en nuestro país no haya podido resolver un caso que ha herido tan hondamente el patrimonio cultural y el sentimiento religioso del pueblo".
"Como Iglesia Católica invocamos y nos adherimos a la justicia divina la cual prevalecerá a pesar de las limitaciones e injusticias humanas. Hacemos votos para que esta experiencia sirva, al menos, para tomar conciencia de la necesidad de una profunda y verdadera reestructuración del sistema judicial en Bolivia", añadió.
Finalmente, el Prelado pidió orar "a nuestra Madre, la Virgen de Copacabana, para que perdone el agravio de sus hijos y nos ayude a vivir como hermanos, desterrando todo tipo de sacrilegio, el oportunismo, los recelos, la mentira y el deseo de venganza".