Los milagros atribuidos a la intercesión de Mons. Álvaro del Portillo continúan. En Oviedo (España) Nuria Rodríguez asegura que el primer sucesor de San Josemaría fundador del Opus Dei, intercedió en la curación de su hija Lucía hace nueve años cuando era un bebé.
Según informa el diario El Comercio la niña tenía tan sólo un mes y medio cuando tuvo que ser ingresada en el hospital debido a convulsiones. Los médicos mantuvieron al bebé en observación durante toda la noche a pesar de que no habían encontrado ningún indicio extraño.
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Durante el tiempo que estuvo ingresada la pequeña sufrió ocho convulsiones más, una cada hora y media, de las que lograba volver en sí de forma natural. Sin embargo, en una de ellas no consiguió recuperarse, por lo que la ingresaron en la UCI.
Según cuenta la madre, "los médicos nos informaron de que no sabían qué le pasaba pero que no lograban sacarla de ese estatus convulsivo".
Horas después los médicos volvieron a informar a la familia que se veían obligados a inducir a la niña a un 'coma barbitúrico' para que no muriera, ya que en el estado de coma en el que se encontraba no era posible que siguiera viva mucho más tiempo.
"El doctor nos dijo que era como si su cerebro estuviera en llamas y no pudiesen apagarlas", explica Nuria Rodríguez. Y a pesar de los esfuerzos, los médicos recomendaron a los padres de Lucía que pasaran a despedirse de ella ya que era muy poco probable que sobreviviera y saliera de ese coma.
"En esos momentos no puedes evitar que se te venga el mundo encima", recuerda la madre quien acudió a la intercesión de Mons. Álvaro del Portillo. "No soy del Opus Dei pero siempre he sido creyente", afirma.
Según explica la madre, ella rezó a todos los santos que conocía y todas las estampas que encontró por el hospital. Sin embargo, una de estas estampas, la de Mons. Álvaro del Portillo, fue la que metió en la cartera junto la foto de su hija.
Después de un día entero en la Unidad de Cuidados Intensivos, los médicos volvieron a intentar sacar a la pequeña Lucía del coma del que finalmente y de manera inexplicable, tras quitarle progresivamente la mediación, despertó.
Todavía hoy se desconoce cómo Lucía logró sobrevivir. Sin embargo su madre afirma que del Portillo le ayudó. "Le recé a mucha gente pero como puse su estampita junto a la foto de mi hija siempre pensé que se había salvado por intercesión suya. Desde entonces aún llevo su estampa en la cartera", afirma.
Mons. Álvaro del Portillo será beatificado el próximo 27 de septiembre en Madrid tras la constatación de su intercesión en la curación de un niño chileno que había sufrido un paro cardíaco de más de media hora.