Ante la consulta de numerosos fieles sobre una presunta "misa de sanación", el Arzobispado de La Plata (Argentina), explicó que el sacerdote Carlos Manuel Sara, de 59 años, fue excomulgado por haber incurrido en cisma, y por lo tanto, "tiene prohibida cualquier participación ministerial en la celebración del sacrificio eucarístico o en cualquier otra ceremonia de culto, como asimismo la celebración de los sacramentos o sacramentales".
La sede platense recordó que la actividad del sacerdote cismático requirió oportunamente la advertencia del Obispado de Mar del Plata.
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A Sara se le declaró la excomunión latae sententiae (automática), por haber incurrido en el delito de cisma, a tenor del canon 1364 (Decreto 085/2012).
El canon 1364 establece que "el apóstata de la fe, el hereje o el cismático incurren en excomunión latae sententiae, quedando firme lo prescrito en el ⇒ c. 194 § 1, 2; el clérigo puede ser castigado además con las penas enumeradas en el ⇒ c. 1336 § 1, 1 , 2 y 3. § 2. Si lo requiere la contumacia prolongada o la gravedad del escándalo, se pueden añadir otras penas, sin exceptuar la expulsión del estado clerical".
El Arzobispado de La Plata solicita a los fieles abstenerse de concurrir a sus convocatorias, bajo nombre de la "Fundación Jesucristo Sanador" y buscar en los legítimos pastores de la Iglesia los canales adecuados para la vida sacramental.