La Autoridad de Información Financiera (AIF) de la Santa Sede y el Estado de la Ciudad del Vaticano presentaron su Informe Anual de 2013 que destaca que durante el año pasado se incrementó la cooperación internacional y se fortalecieron "significativamente los instrumentos jurídicos e institucionales" para combatir la delincuencia financiera.
"En 2013 hemos dado pasos decisivos en la mejora de los instrumentos jurídicos y en su eficacia operativa'', afirmó René Brülhart, Director de la AIF. ''La evaluación llevada a cabo en diciembre de 2013 por MONEYVAL -el Comité de Expertos para la evaluación de las medidas contra el lavado de dinero y la financiación del terrorismo del Consejo de Europa- y nuestras estadísticas nos permiten decir que ahora tenemos en función un sistema correcto y equivalente para prevenir y combatir la delincuencia financiera. Un sistema que está bien alineado con los estándares internacionales", aseguró.
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El informe señala que la AIF ha registrado un crecimiento significativo de los ''Avisos de transacciones sospechosas", que han pasado de seis en 2012 a 202 en 2013, reflejándose tanto el desarrollo de un marco jurídico adecuado, como una mejora sustancial en el rendimiento operativo de las entidades sujetas a la supervisión de la AIF, con miras a la prevención de la delincuencia financiera. Se han presentado al Promotor de Justicia cinco avisos para su posterior investigación por parte de las autoridades judiciales.
El número de solicitudes de información presentada por la AIF a autoridades extranjeras competentes ha pasado de una en 2012 a 28, mientras que el número de solicitudes recibidas en la AIF por parte de autoridades extranjeras ha pasado de tres en 2012 a 53 en 2013.
"Este aumento se debe también a la cooperación internacional promovida por una serie de acuerdos bilaterales", señaló Brülhart. Como se recuerda, desde el año pasado la AIF es miembro del Grupo Egmont, la red mundial de Unidades de Información Financiera, y ha firmado varios acuerdos bilaterales para institucionalizar la cooperación mutua en el ámbito de la lucha contra el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo. Además se suscribieron memorandos de Entendimiento con Alemania, Italia, los Países Bajos, Eslovenia y Estados Unidos.
El Papa Francisco con dos Motu Proprio en julio y agosto amplió las competencias de las autoridades de la Santa Sede, en particular de la AIF, alineando los instrumentos jurídicos a las normas internacionales.
Con un tercer Motu Proprio de noviembre de 2013, el Papa respondió a las exigencias surgidas con la ampliación de las responsabilidades de la AIF publicando un nuevo Estatuto de la misma. Sus características esenciales son que la AIF se basa en dos pilares, la supervisión y la información financiera, aclarando, al mismo tiempo, algunos aspectos de su gobierno, tales como los requisitos de experiencia profesional y financiera del personal clave de los órganos de la AIF.
En el primer trimestre de 2014, la AIF ha llevado a cabo la primera inspección ordinaria ''in situ'' del Instituto para las Obras de Religión (IOR), para verificar la aplicación de las medidas establecidas para prevenir e impedir el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo de acuerdo con la Ley n. XVIII, del 8 de octubre de 2013.
Según informó la Santa Sede, la inspección ha puesto de relieve los logros sustanciales del IOR en los últimos 12 meses. Como resultado de la inspección, la AIF ha formulado un plan de acción para que los procedimientos respondan plenamente a los requisitos de la Ley no. XVIII y para la implementación de mejoras organizativas y de procedimientos.
La AIF es la autoridad competente de la Santa Sede/ Estado de la Ciudad del Vaticano en materia de supervisión e información financiera con el fin de prevenir e impedir el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo. Fue instituida por Benedicto XVI en su carta apostólica en forma de Motu Proprio del 30 de diciembre de 2010.