Dylan Siegel, es un menor estadounidense de siete años que al enterarse que la vida de su mejor amigo Jonah Pournazarian (7) corre peligro, decidió recaudar fondos para ayudar a acelerar la investigación médica y así encontrar una cura que pueda salvar su vida, por eso, inició una conmovedora aventura de amistad que ha dado la vuelta al mundo.
Jonah sufre de una extraña enfermedad hepática llamada glucogenosis de tipo 1B, que dificulta la metabolización de los alimentos que consume, lo que obliga a que el niño se alimente con una dieta especial de agua, cremas y sopas a través de un tubo conectado a su estómago. Su madre inicia la rutina de alimentación a las 3 de la mañana de cada día.
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Para ayudar a su amigo, Dylan tuvo la iniciativa de escribir un libro ilustrado que le tomó menos de una hora en hacerlo y lo tituló "Chocolate Bar" (barra de chocolate), expresión que él utiliza cuando quiere describir alguna experiencia que para él es "maravillosa" o "fantástica".
En el libro dedicado a Jonah, Dylan escribe frases como "me gusta ir a la playa, eso es una barra de chocolate"; "a mi me gusta nadar, eso es una barra de chocolate" entre otros y termina con la frase "ayudar a mi mejor amigo es la mejor barra de chocolate"..
La idea del pequeño fue vender copias de su libro para recaudar un millón de dólares, actualmente ha logrado 750 mil que están siendo destinados al laboratorio de la Escuela de Medicina de la Universidad de Florida en Gainsville para la investigación.
"Me impresiona que no sólo tuvo la idea, sino que la llevó a cabo y lo logró", señaló al Huffington Post la mamá de Dylan, Debra Siegel, quien dijo además que se dio cuenta que el libro "traería eco".
El libro empezó a venderse por internet, posteriormente ya Dylan y Jonah firmaban el libro en las librerías de los centros comerciales de Los Ángeles y daban entrevistas a diferentes medios y programas periodísticos nacionales e internacionales.
Los padres de los niños dejan que el contacto con la prensa sea natural para ellos, para que lo puedan manejar bien por su corta edad, señalaron además que es emocionante verlos en televisión.
La situación de salud vulnerable de Jonah lo ha llevado varias veces a ser internado en el hospital, en el colegio tiene un monitor que controla el azúcar en su sangre, pero nada es impedimento para que la amistad entre ellos sea cada vez más fuerte.
Los niños incluso han recibido el primer reconocimiento del joven filantrópico del año otorgado por la Universidad de Florida.
Chocolate Bar también ha ideado otras maneras de recaudar fondos como la venta de camisetas, gorras, bolsas y protectores de IPhone´s.
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