Los padres de Claire Davis, la joven estudiante de 17 años víctima del tiroteo ocurrido el 13 de diciembre en la escuela secundaria Arapahoe en la zona de Centennial, Denver (Estados Unidos), dijeron durante la ceremonia en memoria de su hija, que perdonan al asesino y pidieron que todas las personas hagan lo mismo.
El 13 de diciembre de 2013, Karl Pierson (18), estudiante de la misma escuela ingresó a su centro de estudios en horario clase portando una escopeta y más de 125 municiones, un machete y tres bombas incendiarias caseras, con el objetivo, según la policía, de agredir a uno de los docentes que lo había sancionado.
Pierson empezó a disparar y dos estudiantes resultaron heridos. Claire murió ocho días después por un balazo en la cabeza. Luego de disparar contra la joven, Pierson se suicidó.
Michael y Desiree Davis, padres de Claire, señalaron que el joven estaba lleno de "ira, rabia y odio (…) estaba tan cegado por sus emociones que no sabía lo que estaba haciendo", es por eso que "mi esposa y yo perdonamos a Karl Pierson por lo que hizo (..) y nos gustaría pedirles a todos que aquí presentes y los que están mirando (por la televisión) que lo perdonen" y resaltó nuevamente "él no sabía lo que estaba haciendo", según informó Foxnews.com.
El padre de la joven, conteniendo las lágrimas subrayó que "el hombre que disparó a Claire tenía un nombre. Su nombre era Karl Pierson", haciendo referencia a la disposición de los agentes legales hicieron a no llamarlo públicamente por su nombre sino como el asesino.
Dijo también que las últimas palabras de su hija fueron "Dios mío, Karl ¿Qué estás haciendo?" y explicó que de esta manera su hija estaba tratando de iluminar la oscuridad emocional que afectaba a Pierson.