Esta tarde (hora local) en la Plaza de San Pedro, tras una ceremonia que duró poco más de una hora, se llevó a cabo el encendido de las luces del Árbol de Navidad de 25 metros de alto obsequiado por la comunidad de Waldmünchen, Baviera (Alemania), que adornará el Vaticano durante este tiempo navideño.
Como es tradición, la decoración e iluminación del abeto estuvo a cargo de las maestranzas de la Gobernación y del personal del Vaticano.
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El Papa Francisco en un discurso a la delegación de Baviera que recibió por la mañana de hoy, señaló que la iluminación del árbol simboliza la luz divina que "disipa las tinieblas del error y del pecado".
En el acto de iluminación no estuvo presente el Papa, pero si autoridades vaticanas, así como representantes públicos de Baviera y de Roma.
Al terminar las fiestas, el abeto será utilizado para la fabricación de juguetes y objetos de uso cotidiano, según informó el Sistema de Noticias del Vaticano.