Mons. Enrique Glennie Graue, rector del Santuario de la Virgen de Guadalupe, celebró esta madrugada la Misa en el día en que la Iglesia celebra a la Morenita del Tepeyac, y dijo que ella es modelo de la misericordia que se necesita para responder a los muchos males que afectan al mundo hoy en día.

Según señala el SIAME, Mons. Glennie denunció una serie de males actuales como "una atroz delincuencia organizada, injusticias y corrupción que claman al cielo, miles de familias condenadas al hambre y a una pobreza degradante, secuestros infames, divisiones entre los pueblos, asesinatos de niños en el seno de sus propias madres, extorsiones… devastadoras catástrofes naturales, inundaciones, sequías, enfermedades que aquejan a una grande porción de nuestro pueblo".

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El sufrimiento que generan estos males, prosiguió, "provoca que numerosas personas vivan como si Dios no existiera, sobrellevando un inevitable vacío de sentido de la vida. A partir de esto el hombre se deshumaniza".

"Cuando se pierden la clemencia, la compasión, el altruismo y el perdón recíproco, ahí campean a sus anchas el egoísmo y la indiferencia ante el prójimo y las relaciones humanas se convierten en meros procesos de intercambio económico. El dinero y el poder se vuelven los valores supremos".

El sacerdote precisó que ante estos males, "la única respuesta viable es la misericordia, que es la actitud que supera el egoísmo y el egocentrismo, y no tiene puesto el corazón en sí mismo, sino en los demás, en especial junto a los pobres y afligidos por toda clase de miserias".

Asimismo, recordó que María de Guadalupe, desde el principio, reconcilió y unió a dos pueblos antagónicos, y manifestó fehacientemente su misericordia con el pueblo derrotado. "En Ella se manifiesta victoriosa la misericordia divina, que se opone al mal y al pecado, los hace retroceder y crea espacios para la vida. Así, María es signo de que el poder del mal y del pecado no puede frustrar el plan divino de salvación para la humanidad".

"Que nuestra madre, Santa María de Guadalupe nos proteja con su manto e ilumine los senderos de nuestras vidas para que sepamos actuar siempre con un gran sentido de misericordia entre todos los que somos hermanos", concluyó.