Una gran cantidad de personas de las casi 100 mil que habitan en el pueblo de Greece, en el estado de Nueva York en Estados Unidos, aún no salen de su asombro porque esta localidad ha sido demandada ante la Corte Suprema por dos ciudadanas que no toleran que los eventos públicos se inicien con una oración.
El día 6 de noviembre la Corte Suprema de Estados Unidos escuchó los alegatos orales del grupo Americans United for Separation of Church and State (Estadounidenses por la seperación de la Iglesia y el Estado), en representación de Susan Galloway y Linda Stephens, quienes afirman que el pueblo de Greece viola la Constitución al iniciar los eventos públicos rezando.
Aunque la mayoría de oraciones han sido presididas por ministros cristianos, el acto está abierto a representantes de cualquier credo.
Al respecto, David Cortman, abogado de Alliance Defending Freedom que tiene a su cargo la defensa de Greece, señaló que "los miembros de la comunidad deben tener la libertad de rezar sin ser censurados".
"Comenzar los eventos rezando es una libertad atesorada que los autores de la Constitución practicaban. Los estadounidenses no deben ser obligados a traicionar esta libertad solo para apaciguar a alguien que dice que se ofende por escuchar una oración", dijo Cortman en un comunicado sobre este caso.
El Fondo Becket para la Libertad Religiosa, uno de los 26 organismos que ha presentado un recurso a favor del pueblo de Greece, argumentó que la Corte Suprema debe respetar la actitud histórica de respeto hacia la oración y la libertad religiosa.
Eric Rassbach, consejero general del Fondo Becket, afirma sobre este caso que "la Corte debe decidir si las ciudades pues reconocer y celebrar la diversidad religiosa del país o si el gobierno debe tratar la identidad religiosa como una amenaza".
Además, explicaron los que defienden a Greece, la Cámara de Senadores y la de Diputados en Estados Unidos tienen ambas capellanes. Recordaron además que los primeros grandes líderes de la historia de la nación se referían a Dios y rezaban públicamente.