A menos de dos semanas de las elecciones presidenciales y tras evadir los debates públicos, la candidata de Nueva Mayoría, Michelle Bachelet, hizo público su Plan de Gobierno en el que incorpora la legalización del aborto y abrir las puertas al matrimonio homosexual.
El programa de gobierno de la candidata de la izquierda, retoma como eje central el cambio a una nueva Constitución, en la que "confluyan las tradiciones constitucionales liberal, democrática y social".
Utilizando una serie de eufemismos, el Plan de Gobierno promote promover políticas a favor de los llamados "derechos sexuales y reproductivos" que incluye la "despenalización de la interrupción voluntaria del embarazo en caso de peligro de la vida de la madre, violación o inviabilidad del feto".
El Plan de Bachelet también ofrece una educación sexual "laica y humanista" y "la disponibilidad efectiva de métodos anticonceptivos, incluyendo la anticoncepción de emergencia".
La candidata también incorporó "una Nueva Agenda de Género basada en los derechos, igualdad y autonomía de las mujeres, impulsada por una institucionalidad renovada y de mayor rango".
"Matrimonio gay": el siguiente paso
Sobre el mal llamado "matrimonio" homosexual, el programa de Bachelet anuncia "un debate abierto, con participación amplia para la elaboración y posterior envío de un proyecto de ley en esta materia".
Además, ofrece apoyo a la ley de identidad de género, que se encuentra en trámite, y "que permita a las personas transexuales, adecuar su nombre y sexo registral de acuerdo a su propia identidad de género".
A inicios de octubre, una encuesta elaborada por el Instituto Chileno de Estudios Municipales (Ichem) y la Universidad Autónoma de Chile mostró que más de la mitad de los votantes de Bachelet no está a favor de la legalización del aborto y el "matrimonio" homosexual.