El equipo directivo de Cáritas Española ha aprobado un paquete de ayudas para responder a las emergencias provocadas por fenómenos meteorológicos adversos y conflictos armados en África, Asia y América Latina.
En primer lugar, Cáritas España destinará 247.049 euros a África para ayudas a las familias desplazadas y a las comunidades de acogida afectadas por el conflicto en la zona norte de Malí, que comenzó en marzo de 2012 entre varios grupos rebeldes y las fuerzas gubernamentales. De la aportación total, 136.918 euros proceden del Convenio de Emergencias suscrito con la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID).
Este programa pretende cubrir las necesidades alimentarias, de refugio y enseres domésticos de 555 familias -unas 3.885 personas- que han tenido que dejar sus casas por el conflicto armado. El proyecto también apoyará a las familias que acogen a los desplazados y que se encuentran en situación de especial vulnerabilidad.
Cáritas Española también ha respondido a los llamamientos de ayuda de emergencia lanzados por las Cáritas de Camboya y Pakistán para socorrer a los millones de damnificados por las inundaciones que desde agosto asolan varias regiones de esos países.
En el caso de Camboya, Cáritas Española ha respondido con un fondo de 40.000 euros para alimentos, lotes de productos de higiene, refugios temporales y unidades móviles de salud. Además 8.000 familias granjeras pobres recibirán apoyo para la recuperación de cultivos.
La respuesta de Caritas Pakistán a esta emergencia –en la que Cáritas Española colabora con 100.000 euros–, se centra en proporcionar ayuda de emergencia a 11.500 familias y 35.000 pacientes.
En Perú se están sufriendo los efectos de la ola de frío invernal más intensa de los últimos diez años. Las bajas temperaturas, acompañadas de nevadas y granizadas, han afectado sobre todo a la población residente en las zonas alto-andinas del país.
Los daños materiales han sido muy numerosos, tanto en viviendas –han resultado afectadas unas 6.300– como en medios de vida de la población, principalmente en ganado y pastos. En concreto, se han perdido más de 26.000 cabezas de ganado y 7.800 hectáreas de cultivos y pastizales. Por eso, se teme que se agrave el estado de la seguridad alimentaria en muchas de las comunidades afectadas, ya de por sí muy vulnerables antes de la ola de frío, además del aumento de enfermedades respiratorias (sobre todo, neumonías) que pueden tener consecuencias graves en los niños menores de cinco años, ancianos y personas con enfermedades crónicas.
Por eso, el equipo directivo de Cáritas España ha aprobado una partida de 90.000 euros para esta situación de emergencia, de los que 31.758 proceden del convenio de emergencias suscrito con AECID y que contribuirá a ayudar al plan de emergencia de Cáritas Perú para cubrir las necesidades básicas en materia de salud de más de 3.280 familias, junto con la recuperación de sus sistemas productivos y la atención veterinaria a las miles de cabezas de ganado que han enfermado por la ola de frío.