Como ya es tradición, el último domingo de septiembre, la Iglesia en el país celebra el Día de Oración por Chile, actividad que incluye una procesión de la imagen de la Virgen del Carmen, Patrona del país.
La multitudinaria procesión de la Virgen se llevó a cabo por las calles del centro de la capital, acompañada por sacerdotes, religiosas, las Camareras de la Virgen del Carmen, las Fuerzas Armadas y de Orden, colegios, parroquias y movimientos.
La actividad culminó en el frontis del Museo de Bellas Artes, con una Eucaristía presidida por Mons. Cristián Contreras, Obispo Auxiliar de Santiago, quien fue también el encargado de cerrar el Año de la Fe.
Durante la homilía, Mons. Contreras ofreció la Misa por la paz, el entendimiento, el reencuentro y la reconciliación de todos los chilenos.
Además, recordó la presencia y la importancia de la devoción de la Virgen del Carmen en la historia de Chile: "Siento en el alma la misión de transmitir esta devoción a la próxima generación, para que nunca falte en el alma de la patria el amor por la Virgen María", señaló.
"La fe auténtica se abre de par en par en el corazón de los creyentes, para comunicar a otros los amores y certezas más profundas que nosotros hemos recibido. Y ese amor y esa certeza se llama Jesús, hijo de Dios e hijo de María, nuestro Salvador", afirmó el Obispo.
Al finalizar la celebración eucarística, se anunció la Misión Territorial para el año 2014, y la imagen de la Virgen del Carmen volvió a su hogar, la Catedral, rodeada de flores y seguida por música y grupos de baile.