El Arzobispo de Ayacucho y Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana (CEP), Mons. Salvador Piñeiro, confirmó en un comunicado publicado hoy que el ex Obispo Auxiliar de Ayacucho, fue sancionado con "la pérdida total del estado clerical" por "pecados contra el sexto mandamiento", negó haber recibido alguna denuncia contra él y apoya "al Ministerio Público, que de oficio ha iniciado un proceso de investigación, para que la verdad sea conocida".
En el comunicado, Mons. Piñeiro explicó que estuvo de viaje "en los Estados Unidos para agradecer a las Instituciones que colaboran con nuestras obras sociales en Ayacucho" y que a su regreso se ha "enterado con amplitud sobre la situación que está viviendo la Iglesia de Ayacucho por la triste noticia de quien fuera su obispo auxiliar".
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El Arzobispo explicó que el 5 de julio pasado fue "notificado verbalmente por la Nunciatura Apostólica sobre la decisión del Santo Padre Francisco de imponer la pena de dimisión al Sr. Gabino Miranda Melgarejo, por pecados contra el sexto mandamiento, en proceso sujeto al Secreto Pontificio".
"La sanción que ha aplicado la Santa Sede al Sr. Gabino Miranda Melgarejo es la más rigurosa de las penas para un clérigo: la pérdida total del estado clerical", indicó y aclaró que "durante los dos años que estoy como Arzobispo de Ayacucho nunca he recibido una denuncia contra él".
Aunque los motivos exactos de la sanción se desconocen, el Arzobispo apoyó "al Ministerio Público, que de oficio ha iniciado un proceso de investigación, para que la verdad sea conocida", ya que Miranda fue acusado en la prensa de pedofilia.
Mons. Piñeiro pidió "a los hijos de la Iglesia comprender el dolor que todos sentimos por este hecho y ruego sus oraciones para que seamos sacerdotes y fieles según el corazón de Cristo".
Miranda fue señalado la semana pasada como "pedófilo" por otro Obispo peruano, el Emérito de Chimbote, Mons. Luis Bambarén, y por el presidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, el peruano Diego García Sayán, antes que Mons. Salvador Piñeiro o la Nunciatura Apostólica en Lima explicaran oficialmente su estatus.