Eduardo Cardet, miembro del Consejo Coordinador del Movimiento Cristiano Liberación (MCL), denunció este martes que su esposa y sus dos hijos - de diez y siete años-, han sido amenazados por la Seguridad del Estado en Holguín (Cuba), como represalia por las declaraciones que el dirigente está brindando en el extranjero a favor del plebiscito para la isla.
En declaraciones a ACI Prensa, Cardet señaló que las amenazas ocurrieron el 1 de septiembre a través del oficial Juan Carlos Espinoza, que se presentó en su vivienda en la localidad de Velasco (Holguín), "aprovechando que estoy ausente" para amenazar a su familia "por lo que estoy haciendo" fuera de Cuba y que son calificadas por el régimen como "actividades contrarrevolucionarias".
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Cardet -elegido recientemente como uno de los nuevos vicepresidentes de la Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA)-, se encuentra actualmente en Estados Unidos luego de haber viajado a México junto a Rosa María Payá, donde mantuvieron encuentros con líderes regionales y medios de comunicación para denunciar la falta de derechos humanos en la isla y llamar a la comunidad internacional a apoyar la realización del plebiscito en Cuba.
Sin embargo, indicó que estas declaraciones han ocasionado que el régimen comunista "intimide y acose" a su esposa e hijos. "Le han dicho a mi esposa que me aconseje que abandone la actividad que estoy realizando acá. Están haciendo una intimidación y acoso. También en días anteriores hicieron circular un rumor de que cuando regresara a Cuba iban a hacer un acto de repudio" contra mi persona, denunció.
Cardet dijo que luego del "asesinato de Oswaldo Payá y Harold Cepero, es muy sintomático todo esto que está pasando, pero es un indicio más de que puede ocurrir algo. Amedrentar a mi familia es un golpe muy sucio, muy bajo. Todos sabemos de lo que (el Gobierno) es capaz".
El líder del MCL dijo que a pesar de las amenazas su esposa está tranquila, "es una mujer muy valiente como lo son las mujeres cubanas".
Sin embargo, advirtió que el modo como murieron Payá Sardiñas y Cepero ha dejado marcados a sus hijos. "Ellos son testigos de las amenazas e intimidaciones. Incluso el mayor, cuando salgo de mi casa le pide a su mamá que me llame para saber que voy a regresar".
Cardet denunció que las mismas amenazas reciben los demás miembros de la oposición pacífica dentro de Cuba, pues el Gobierno busca "atacarnos por el lado más débil que es la familia".