El Cardenal colombiano Darío Castrillón Hoyos respondió a los líderes de la guerrilla narcoterrorista de las FARC, que acusaron desde La Habana a la Iglesia Católica de no contribuir a la reconciliación del país, y les exigió que no digan "cosas que no son".
El Purpurado hizo estas afirmaciones el 20 de agosto en el Senado de Colombia en donde recibió la orden del Congreso en el grado de Gran Oficial, en reconocimiento de su gran labor pastoral en el país.
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Dirigiéndose a los narcoterroristas de las FARC, el Cardenal dijo que "estamos para perdonar y esto lo está haciendo, la Iglesia ciertamente más que la paz, ¿no es cierto Iván (Márquez), no es cierto que la Iglesia si lo ha hecho? No digas cosas que no son".
El Purpurado afirmó también "amiguitos de las FARC ustedes no son los buenos de la partida, no se conviertan ahora en los que le van a decir a la Iglesia lo que tiene que hacer, hagan ustedes lo que tienen que hacer, la Iglesia nos llama a la convivencia, a la fraternidad".
El Cardenal también señaló "queridos amiguitos de las FARC nos hemos encontrado muchas veces, no nos hemos encontrado en un club, nos hemos encontrado a caballo, he cabalgado en campamentos".
De hecho un par de años atrás, en una conferencia realizada en la residencia del embajador de Colombia ante la Santa Sede, el entonces embajador Mauricio Velásquez, el Purpurado recordó todo un trabajo de mediación realizado, yendo personalmente a hablar con líderes de la guerrilla en zonas absolutamente inhóspitas y peligrosas. Y dijo que como Arzobispo de Bucaramanga había dado orden a los sacerdotes que atendieran a todos los fieles, incluso a aquellos que estaban relacionados con la guerrilla.
Según señala el diario El Tiempo, el Purpurado aseguró, sobre los diálogos para lograr la paz entre los narcoterroristas de las FARC y el Gobierno, que "Colombia debe entender que no es un proceso fácil, es muy difícil porque hay rencores, ha habido muertos, pero hay que perdonar".
"Estamos en una guerra, cuando en esa guerra los disparos vienen de las FARC son un crimen, cuando vienen de nuestros soldados no es un crimen porque lo hacen en nombre de la ley y por cumplir con su deber. Pero una y otra de las carabinas están matando a un hermano", destacó.