El evento organizado en Lima por la Conferencia de Superioras y Superiores Mayores (Confer) del Perú con la monja hereje Teresa Forcades –que desde hace años apoya el aborto, el matrimonio y la adopción gay, entre otros temas contrarios a la Iglesia– no fue suspendido como indicaron inicialmente en la misma sede de la institución, sino trasladado al auditorio del Concilio Nacional Evangélico del Perú (CONEP).
ACI Prensa constató que el evento ya no se iba a realizar en la sede de la Confer, ubicada en Torre Tagle 2461 en el distrito limeño de Pueblo Libre, sino en la sede del CONEP, ubicado en Huaraz 2030 en el distrito de Breña, desde las 5 hasta las 8:00 p.m. El evento prosigue hoy y concluye este miércoles 14 de agosto.
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Inicialmente los organizadores del evento se resistieron a confirmar la presencia de Teresa Forcades en el local de la CONEP, pero finalmente la hermana Celina Vega, religiosa de San José de Cluny, indicó que la benedictina sí estaba presente pero que no podía atender a la prensa, ni dejarla pasar al auditorio, porque la benedictina iba a estar muy poco tiempo en el país y tenía varios compromisos que atender.
Al ser consultada sobre las razones por las cuales se decidió cambiar el evento de lugar –hecho que incluso se avisó a varias religiosas asistentes el mismo lunes 12 a las 5:00 p.m. en la sede de la Confer– la hermana Vega dijo que no podía responder a esa pregunta.
Con el traslado del evento se hizo caso omiso a la carta del Arzobispo de Lima, Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne, dirigida el 9 de agosto a la hermana Lidia Aguilar, Presidenta de la Confer Perú, en la que señalaba la "seria contradicción con la enseñanza de la Iglesia en temas fundamentales como por ejemplo el de la moral".
En la carta, el Purpurado indicaba: "no autorizo a la Hna. Forcades a participar en dichas conferencias difundidas por ustedes a través de diversos medios" los días 12, 13 y 14 de agosto.
En octubre de 2009, el Cardenal Franc Rodé, Prefecto de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, envió una carta a la abadesa del monasterio benedictino de San Benet de Montserrat, en la que le pide que exija a Sor Teresa Forcades que manifieste públicamente su adhesión a la doctrina católica. Este llamado de atención se dio luego de que la religiosa se declarara públicamente a favor del aborto y la píldora abortiva del día siguiente.
Como respuesta, la monja dijo en un artículo que sí respeta al Magisterio de la Iglesia pero que tiene el derecho a manifestar opiniones contrarias al mismo y, además, se ratificaba en sus posturas a favor del aborto
Sobre las uniones gay, en septiembre de 2011 Forcades dijo: "¿En qué sentido es sacramento el matrimonio? A veces he desarrollado esta idea para argumentar teológicamente la posibilidad del matrimonio homosexual bendecido por la Iglesia, que creo que no es contradictorio con nada de la teología".
Sobre el fallecido expresidente de Venezuela, Forcades dijo al diario El País que prefiere hablar del Hugo Chávez "culto, estratega, inteligente, amoroso con la historia de su país y que ha sido capaz de animar a la gente obteniendo mayorías absolutas".
En marzo de 2013 la benedictina expresó su apoyo a la Candidatura d'Unitat Popular en el Parlament (CUP), un partido de extrema izquierda que la pidió a ella como "nueva jefa" de la Iglesia.
El mes pasado Forcades dijo que para la mayoría de católicos, el nuevo Papa ha generado "una expectativa positiva", pero cree que es un error esperar que el cambio en la institución llegue "desde arriba".
"La mayoría de católicos y católicas nos damos cuenta de lo que dijo el Cardenal (jesuita) Carlo Maria Martini antes de morir: en la Iglesia Católica tenemos un retraso de 200 años en las estructuras", dijo.
Sobre su incursión en la política, Forcades dijo en julio que cuenta con la aprobación del Arzobispado de Barcelona, información que fue desmentida por las autoridades eclesiásticas. Las normas de la Iglesia establecen con claridad que ni los sacerdotes ni los religiosos pueden participar de la política partidaria.