Misterio resuelto. El sacerdote que ayudó en el rescate de una joven accidentada el 4 de agosto en una carretera de Missouri y desapareció luego de rezar con los rescatistas y ungir a la víctima, decidió salir a la luz y se identificó como el Padre Patrick Dowling, de la diócesis de Jefferson City.
En declaraciones a ACI Prensa, el Padre Dowling agradeció "a Dios y a los sorprendentemente competentes rescatistas". "Les agradezco por haberme recibido en una situación tan tensa y permitirme cumplir mi ministerio como sacerdote", señaló.
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Katie Lentz quedó atrapada en su antiguo automóvil Mercedes, tras ser golpeado por otro vehículo que invadió su carril. El conductor de ese vehículo ha sido acusado de conducir en estado de ebriedad.
Los rescatistas trataron de sacar a Lentz de su auto por casi una hora, pero sus esfuerzos parecían en vano. La joven comenzó a perder sus signos vitales y salvar su vida parecía imposible. Katie, que no perdió la conciencia, pidió rezar en voz alta y entonces apareció el Padre Downling "de la nada" según los testigos.
El sacerdote rezó con la joven, le administró la unción de los enfermos y puso a orar a los rescatistas. Según los bomberos, este momento y la presencia del presbítero, les dio calma y fuerza para seguir con el rescate que terminó exitosamente.
Esa mañana, el P. Dowling regresaba de celebrar Misa en Ewing, en reemplazo de un sacerdote enfermo, y se dirigía a su diócesis cuando se encontró con la escena del accidente.
"Las autoridades estaban redirigiendo el tráfico. Esperé hasta que fue posible conducir más cerca de lo ocurrido. Aparqué detrás de un gran vehículo a unos 150 metros de la escena. Pedí permiso al alguacil y me acerqué al lugar del accidente", recordó el sacerdote.
"Absolví y ungí a Katie, y, a pedido de ella, rezaba para que su pierna dejara de doler. Entonces me hice a un lado para que pasaran los miembros del personal de rescate y el piloto que estaban esperando, y recé el rosario en silencio. Me fui cuando el helicóptero estaba a punto de despegar", agregó.
Al sacerdote lo sorprendió la tranquilidad de los rescatistas. "El sargento tenía completamente todo bajo control, estaba increíblemente tranquilo. Todo el mundo trabajó armoniosamente como un reloj suizo, a pesar de la naturaleza crítica de la escena".
"Felicito a los rescatistas,, el personal de la Patrulla de Carreteras, el equipo del helicóptero, las enfermeras y todos los que trabajaron tan profesionalmente. Dios ha bendecido a su trabajo. Espero que el mérito sea adjudicado a quien se lo merece", añadió.
ACI Prensa entrevistó brevemente al P. Dowling el 12 de agosto, y explicó que le dio a Lentz la Unción de los Enfermos, así como la absolución.
El sacerdote aseguró que solo cumplió con los deberes normales de un sacerdote, "excepto que había algo extraordinario en la secuencia de eventos que coincidieron a tiempo con la Unción".
"Había mucha gente rezando ahí, mucha, mucha gente… y todos estaban rezando obviamente por su curación y su seguridad".
"Fui probablemente parte de la respuesta a sus oraciones, yo pasé por ahí, la ungí y absolví, (pero) no dije otra palabra", explicó el P. Dowling negando haber ordenado a la maquinaria funcionar o asegurar el éxito de la operación.
"Eso no vino de mis labios, a pesar de que dos personas lo escucharon", indicó.
Irlandés de nacimiento, el P. Dowling fue ordenado sacerdote por la diócesis de Jefferson City en 1982. Él ha servido en varias parroquias de la diócesis, así como en Sudamérica, en dos parroquias de misión en Nazca y Marcona, en Perú.
El Padre Dowling actualmente sirve en la pastoral penitenciaria, y trabaja con la población hispanohablante de la Diócesis de Jefferson City.