El Obispo de Aberdeen, Mons. Hugh Gilbert, se ha disculpado públicamente este domingo en nombre de la Iglesia por los abusos físicos y sexuales a los alumnos de dos colegios escoceses, según ha informado la cadena británica BBC.
La disculpa llega después de que la BBC encontrara pruebas de abusos físicos y sexuales cometidos por monjes benedictinos contra alumnos de la escuela Fort Augustus, una abadía de la Orden Benedictina clausurada en 1998, y de la escuela preparatoria que la orden tiene en la comarca de East Lothian, en el sureste de Escocia.
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"Es algo amargo, vergonzoso y alarmante que en esta escuela un número de hombres, bautizados y consagrados cristianos, hayan sufrido abusos físicos o sexuales perpetrados por aquellos que debían cuidarles", ha declarado Mons. Gilbert.
"Estamos ansiosos por que haya una investigación policial exhaustiva sobre todo esto y por que todo lo que pueda hacerse por las víctimas sea hecho. Todos nosotros debemos rezar por todos aquellos que han sufrido", ha añadido.
Durante una investigación de seis meses, la BBC entrevistó a más de 50 alumnos de dichas escuelas. Algunos de ellos reconocieron no tener más que buenos recuerdos del tiempo que pasaron en esos colegios; sin embargo, otros revelaron haber sido víctimas de abusos físicos y sexuales por parte de los monjes de la congregación.
El pasado lunes, la BBC de Escocia emitió el documental 'Pecados de nuestros padres' en el que se descubren los abusos cometidos por los monjes benedictinos en esos dos colegios durante un periodo de 30 años. Desde su emisión, otros antiguos alumnos se han puesto en contacto con la BBC y han reconocido haber sufrido abusos. La Policía de Escocia ha confirmado que está investigando estos casos.
"La Iglesia Católica de Escocia ha estado abordando este problema de forma cada vez más eficaz en los últimos años", ha afirmado Gilbert. "Queremos trabajar con todos los cuerpos públicos que se preocupan por los jóvenes y los adultos vulnerables. Deseamos compartir nuestras mejores prácticas y nuestra experiencia para aprender la lección y que los niños puedan sentirse plenamente protegidos", ha concluido.