El movimiento VIDA SV salió en defensa de la independencia jurídica del El Salvador y le recordó a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que su resolución del 29 de mayo que exige que se realice el aborto en el caso de "Beatriz" -seudónimo-, "de ningún modo puede dejar sin efecto la resolución de la Sala de lo Constitucional, ellos no pueden mandar sobre nuestra Constitución".
Como se recuerda, "Beatriz" es una joven de 22 años, que padece lupus y está embarazada de un bebé con anencefalia. La Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de El Salvador rechazó el 29 de mayo un recurso interpuesto por "Beatriz" para que se le realice el mal llamado aborto terapéutico y ordenó a las autoridades médicas del país que continúen con los cuidados que le han proporcionado hasta ahora.
Acto seguido, la CIDH decidió emitir ese mismo día su resolución a pesar de que, tal como admite en su documento, no "se ha presentado una petición inicial ante la Comisión Interamericana" ni tampoco existe "propiamente un caso contencioso en el Sistema Interamericano", argumentando que en el caso de "Beatriz" pude producirse "una afectación grave e inminente de derechos humanos".
En un comunicado remitido hoy a ACI Prensa, el movimiento VIDA SV expresó su rechazo absoluto a la "injerencia" de la CIDH. "Sabemos que la orden de la CIDH de ningún modo puede dejar sin efecto la resolución de la Sala de lo Constitucional, ellos no pueden mandar sobre nuestra Constitución, la única instancia que tiene competencia para autorizar un aborto es la Asamblea Legislativa de El Salvador", señaló.
VIDA SV, que se autodefine como "un movimiento de jóvenes líderes y comprometidos con la lucha por la defensa de la vida" en El Salvador, indicó que han seguido el caso de "Beatriz" desde el principio, por lo que no dudan "en afirmar que este quedará en la historia únicamente como el fracaso de un intento de legalizar el aborto en nuestro país".
El caso de "Beatriz", aseguró la organización defensora de la vida es "un caso fabricado que se valió de una fuerte manipulación mediática respaldada por diferentes medios de comunicación nacionales e internacionales que emitían falsos conceptos, con el propósito de conmover la opinión pública desplazando el análisis reflexivo con el sentimentalismo y finalmente convenciendo a la población de que el aborto es 'un mal necesario'".
"'Beatriz' nunca ha necesitado el aborto. 'Beatriz' ya tiene 26 semanas de gestación y los médicos que la están atendiendo correctamente hasta este momento deben tener claro que la ley no impide que pueden intervenirla si ella presentara alguna complicación, tal como lo hicieron en su embarazo anterior, en el que hicieron una cesárea a las 32 semanas", indicó el comunicado.
En efecto, los expertos del Instituto de Medicina Legal (IML) de El Salvador, tras una evaluación a "Beatriz" tomada en consideración por la Sala de lo Constitucional de la CSJ, aseguró que "no hay una razón médica para suspender el embarazo" de la joven.
En declaraciones a la prensa local, el director del IML, el médico psiquiatra José Miguel Fortín, denunció que en este caso "se ha estado manipulando a la muchacha desde el principio y se están diciendo cosas que no son verdad y que Medicina Legal no puede acompañar", pues quienes promueven el aborto con el caso "Beatriz" han difundido la idea de que ella "está sometida al riesgo de morir si no se decide a sacar el niño, (pero) no se le ha informado respecto a alternativas a este procedimiento".
"No es cierto lo que le han dicho, no es cierto que esté en riesgo inminente, no es cierto que vaya a mejorar si se le saca al niño y no es cierto que El Salvador es un estado talibán", aseguró el Dr. Fortín.
Por su parte, VIDA SV explicó que la legislación salvadoreña "permite un parto inmaduro o prematuro cuando médicamente es necesario para proteger la salud de la madre, pero no permite el aborto. La sentencia emitida por la Sala de lo Constitucional es un triunfo de todos aquellos que defendemos la vida y dignidad de Beatriz y su hijo en gestación".
"Las declaraciones emitidas por la Ministra de Salud y el Director de Maternidad en las cuáles argumentan tener miedo de proceder con un parto inducido porque el código penal lo establece como aborto, es totalmente falso ya que en El Salvador se inducen partos como un procedimiento común en casos de preeclampsia u otras complicaciones en el embarazo", indicó el comunicado.
La CIDH y el aborto
Ya en 2012, diversas organizaciones pro-vida advirtieron que varios jueces de la CIDH tienen una postura parcializada a favor del aborto, entre los que figuran algunos de los que firmaron la resolución del caso "Beatriz", como Humberto Sierra Porto, Alberto Pérez Pérez y el presidente de la CIDH, Diego García-Sayán.
Estos jueces condenaron a Costa Rica el año pasado por prohibir la fecundación in vitro, a pesar de que varios expertos habían defendido el derecho de ese país a "proteger la vida del embrión humano rechazando las técnicas de fertilización in vitro, que de suyo ocasionan pérdidas y/o destrucción embrionaria".