La hija del fundador del Movimiento Cristiano Liberación (MCL), Rosa María Payá, denunció que las reformas que el Gobierno intenta vender como un proceso de apertura "no entregan los derechos a los ciudadanos", sino que son un método más para controlar a los cubanos.
En un artículo publicado en la quinta edición de la revista Somos Liberación, del MCL, Payá Acevedo se refirió a las reformas iniciadas por Raúl Castro desde que asumió el mando del país en 2007.
La última reforma es la autorización para que las personas naturales puedan importar sin carácter comercial electrodomésticos como planchas, microondas, cocinas vitrocerámicas y sistemas de aire acondicionado, siempre que su valor y cantidad se correspondan con los límites establecidos en la legislación vigente.
Rosa María señaló que "estas pequeñas transformaciones legales convierten los derechos en privilegios, y a los privilegiados les queda prohibida cualquier actitud o expresión alternativa a la dictada por las autoridades, como condición para mantener la concesión que les ha sido entregada".
La joven líder puso como ejemplo el caso de Madelaine Escobar, miembro del MCL que posee una cafetería en la provincia de Holguín, pero cuya licencia para vender le fue retirada "con una excusa falsa y muchos cuestionamientos sobre su trabajo en el MCL". De esta manera, denunció, "la concesión de una licencia es utilizada a menudo para chantajear al ciudadano, con el fin de anularle cívica y políticamente. Esta es la otra aplicación de la llamada Ley de Cuentapropismo".
"Cada reforma actúa como un método más de control de los ciudadanos, en lugar de ser una herramienta de empoderamiento de los cubanos y de fortalecimiento de la sociedad civil", expresó la hija del líder católico.
En su artículo, Rosa María recordó que fue contra este "Cambio Fraude" que lucharon su padre Oswaldo Payá y el activista Harold Cepero, pues el objetivo del régimen es "mejorar su imagen, conseguir tratados económicos con actores internacionales y perpetuarse en el poder".
"Pero el Cambio Fraude no es una opción para el pueblo de Cuba, y ante esta falta de alternativas que ofrece el Gobierno se levantan las demandas del Camino del Pueblo en las que mi padre y Harold trabajaron; y que son la iniciativa de la mayor parte de la oposición dentro y fuera de Cuba. Presentan una visión de la transición pacífica, son una hoja de ruta que pasa por el reconocimiento de los derechos ciudadanos, el diálogo y las elecciones libres", explicó.
Indicó que el Camino del Pueblo "evidencia la unidad de la oposición", pues acoge todas las tendencias y los estilos con que se lucha "por los mismos cambios".
"La demanda de plebiscito del Proyecto Varela, que piden desde hace más de 10 años más de 25000 ciudadanos, para que cambie la ley y se garanticen algunos derechos fundamentales, se inserta también en esta plataforma", expresó la joven, que llamó a la comunidad internacional a reconocer "las demandas que vienen del pueblo y no el Cambio Fraude que el Gobierno trata de imponer. Es tiempo de que como pueblo exijamos lo que es común a todos y derecho de todos, es urgente, se nos acaba el tiempo".
La revista Somos Liberación se encuentra en PDF en http://www.oswaldopaya.org/es/up/Somos-Liberación-No.-52.pdf