La joven líder del Movimiento Cristiano Liberación (MCL), Rosa María Payá, reafirmó que su familia y la oposición seguirá buscando que se conozca la verdad sobre la muerte de su padre Oswaldo Payá y del activista Harold Cepero, ocurridas hace diez meses luego que su vehículo fuera sacado de la carretera por un auto de la Seguridad del Estado.
"Nuestros esfuerzos desde entonces se han encaminado también a aclarar la verdad de lo ocurrido, el Gobierno Cubano dio una versión de los hechos falsa y plagada de contradicciones evidentes. Como familia, como amigos y como pueblo cubano tenemos derecho a saber la verdad. Pero no es curar heridas del pasado lo que estamos buscando, es prevenir que lo que le ocurrió a mi padre y a Harold no le vuelva a ocurrir a alguien más", expresó en un artículo publicado en la quinta edición de la revista Somos Liberación, del MCL.
Rosa María recordó que el Gobierno comunista afirmó que la muerte de ambos disidentes fue por un accidente vehícular y, para reafirmarse, el régimen culpó al español Ángel Carromero por ser quien manejaba el automóvil. Sin embargo, recordó Rosa María, la información que fue recabando la familia y la oposición demostró que la versión de las autoridades está lejos de la realidad.
"Desde antes de saber que mi padre y Harold habían muerto, ya sabíamos que lo ocurrido no había sido un accidente. Los mensajes de texto que enviaron los sobrevivientes a Madrid y Estocolmo (Carromero y el sueco Aron Modig) diciendo que habían sido embestidos y sacados de la carretera fueron nuestra primera noticia. Las persecuciones y amenazas de muerte recibidas de parte de la Seguridad del Estado del Gobierno Cubano se hicieron sólidas en nuestras mentes y en nuestras vidas, todas de golpe", señaló.
"Con los días comenzó a llegar información de diversas fuentes, desde las actas de declaración de los testigos que leyó el capitán de la policía Fulgencio Medina la noche del 22 de julio de 2012, delante de mis amigos, expresando que había al menos otro auto (uno marca Lada rojo) involucrado, hasta los twits que publicó el Gobierno en una de sus páginas, donde se hacía evidente que seguían a mi padre".
Indicó que luego, durante su viaje a España, conversó con Carromero, quien "me confirma que fueron seguidos todo el tiempo por autos de la Seguridad del Estado y que, en un punto de la carretera, un auto los embiste intencionalmente por detrás. Cuando Ángel consigue detener el auto, personas que venían en el auto Lada rojo, golpean a Aron y a Ángel (los extranjeros) y se los llevan del lugar de los hechos hasta el hospital".
Rosa María dijo que "es urgente" conocer la verdad sobre estos hechos "porque los mismos represores que amenazaban de muerte a mi padre, hoy llaman a casa de mi familia en La Habana para decir: 'Te vamos a matar'. Porque las detenciones arbitrarias, las golpizas y las intimidaciones contra los miembros de nuestro Movimiento y de toda la oposición democrática han ido en aumento dentro de la isla".
"Es urgente porque trabajamos y nos arriesgamos por comenzar un proceso de transición hacia la democracia que pasa por la reconciliación social, que no será verdadera si no parte del reconocimiento de toda la verdad", expresó.
La revista Somos Liberación se encuentra en PDF en http://www.oswaldopaya.org/es/up/Somos-Liberación-No.-52.pdf