La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) solicitó a los miembros de la Suprema de Justicia de la Nación (SCJN), que no cedan ante las presiones abortistas y feministas que buscan revertir el blindaje del derecho a la vida desde la concepción en tres de los 18 estados que modificaron sus respectivas constituciones para garantizar este derecho fundamental.
En un comunicado emitido hoy, los prelados se refieren a tres demandas presentadas por los municipios de Arroyo Seco en el estado de Querétaro, Asunción Ixtaltepec en el estado de Oaxaca; y Uriangato, en el estado de Guanajuato.
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Estas medidas legales son apoyadas por el ministro (juez) Fernando Franco de la Corte Suprema quien ya ha preparado un dictamen en el que se dice que las respectivas reformas estatales que blindan el derecho a la vida desde la concepción, serían inconstitucionales.
Estas medidas legales deberán resolverse en los próximos días.
Los Obispos de México recuerdan a la Corte Suprema que su principal tarea es defender el derecho "más básico de todos, el derecho a la vida" del que "depende el presente y el futuro de nuestra nación".
"El derecho fundamental a la vida no depende de la calidad moral de quien lo defiende, ni se basa exclusivamente en motivos religiosos, los cuales, en todo caso, también tienen lugar en un auténtico estado laico que no discrimine a ningún ciudadano por sus creencias religiosas", señalan.
Tras resaltar que la vida efectivamente comienza en la fecundación, los Obispos recuerdan que el 29 de enero de 2002 al resolver el asunto de la reforma legislativa al Código Penal y de Procedimientos Penales del Distrito Federal, los 11 ministros (jueces) de la Suprema Corte reconocieron unánimemente que "la Constitución Federal protege la vida humana y, de igual forma, protege al producto de la concepción, en tanto que éste es una manifestación de la vida humana, independientemente del momento del proceso biológico en que se encuentre".
Por ello, añaden, "si progreso significa avanzar positivamente, los mexicanos y mexicanas debemos seguir adelante en el reconocimiento, promoción y defensa de los derechos de toda persona, conscientes de que sólo una sociedad que respete el derecho fundamental a la vida desde su concepción puede ser democrática, vivir en paz y tener futuro".
"Por todo esto, la Conferencia del Episcopado Mexicano espera que, por el bien de las y los ciudadanos mexicanos, la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en congruencia con lo que ha decidido en esta materia, confirme la facultad de los estados a legislar libremente en el ámbito de su soberanía, como corresponde en una República Federal", concluyen.
El comunicado lleva la firma del Presidente de la CEM y Arzobispo de Guadalajara, Cardenal Francisco Robles Ortega; y del Secretario General de la CEM y Obispo Auxiliar de Puebla, Mons. Eugenio Lira Rugarcía.