Un grupo de senadores republicanos y demócratas de Estados Unidos pidieron a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) investigar la muerte del fundador del Movimiento Cristiano Liberación (MCL), Oswaldo Payá, al considerar que su muerte podría haber sido obra del Gobierno cubano.
Una carta distribuida por la oficina del senador republicano cubanoestadounidense Marco Rubio, señala que "recientes entrevistas publicadas con el conductor español del vehículo, Ángel Carromero, plantean serios interrogantes sobre la posibilidad de que el coche de Payá fuera deliberadamente impactado por agentes del gobierno cubano".
Según se informó, la carta fue enviada al secretario ejecutivo de la CIDH, Emilio Álvavez Icaza.
La misiva se refiere a la entrevista a Carromero que publicó el Washington Post el 6 de marzo y donde el joven español confirmó que el 22 de julio de 2012 –día de la muerte de Payá y Harold Cepero-, se enviaron mensajes de texto al extranjero advirtiendo que el vehículo en que viajaban estaba siendo embestido por otro y que luego de ser sacados de la carretera fueron rodeados por militares.
Estas declaraciones, que fueron confirmadas por el sueco Aron Modig, traería abajo la versión del régimen comunista de que ambos disidentes murieron en un accidente de tránsito.
Días atrás, Rosa María Payá, hija del líder católico, pidió a las Naciones Unidas que se realice una investigación independiente que aclare estos hechos ya que, como han afirmado voceros de la oposición cubana, no se puede confiar en la versión del Gobierno cubano.
Según informó la prensa internacional, la CIDH puede en teoría investigar a Cuba a pesar de que la membrecía de la isla en la Organización de Estados Americanos (OEA) fue suspendida en 1962.
Por su parte, Cuba no acepta las visitas de los miembros de esta Comisión, ni sus recomendaciones o críticas, y ha señalado públicamente que no quiere regresar a la OEA.