El Arzobispo de Washington (Estados Unidos), Cardenal Donald Wuerl, saludó Papa Francisco tras su elección, y ofreció junto a los fieles de su Arquidiócesis "nuestra lealtad y amor como Vicario de Cristo, la cabeza visible de la Iglesia Universal y Servidor de los siervos de Dios".
En un comunicado emitido el 13 de marzo, el Cardenal Wuerl manifestó que "junto a los fieles de la Iglesia en Washington, le doy las gracias a Dios porque tenemos un Papa y ofrecemos nuestra alegre felicitación a nuestro Santo Padre Francisco, el antiguo Arzobispo de Buenos Aires, Argentina".
El Arzobispo de Washington aseguró que "el Papa Francisco está dotado de tantos dones que intensifican su misión ahora como el Pastor Universal de los 1,2 mil millones de católicos romanos. Le agradecemos a Dios por los muchos talentos intelectuales y cualidades espirituales, experiencia pastoral y efectivo ministerio del nuevo Papa".
El Cardenal recordó que "cuando Jesús ascendió al cielo, no nos dejó huérfanos. En vez de eso, Él nos dio su nuevo Cuerpo, la Iglesia, dirigida por su Vicario, y envió el Espíritu Santo que da su don a los sucesores de Pedro y los otros apóstoles y sostiene a la Iglesia hoy".
"Las bendición que el Santo Padre nos da, y la razón por la que lo saludamos con tanta alegría, es la reafirmación de nuestra fe católica, bien fundada en la sucesión apostólica y la tradición", aseguró.
El Arzobispo estadounidense subrayó que "el Papa Francisco es más que sólo el sucesor de Benedicto XVI, es el sucesor de todos los que vinieron antes que él, en una línea ininterrumpida que sigue hasta Pedro".
"En el Papa Francisco reconocemos al sucesor de Pedro, y las señales visibles de la unidad de la Iglesia extendida a lo largo del mundo. Él es la piedra angular para la misión, el mensaje y la tradición de la Iglesia", dijo.
El Cardenal Wuerl expresó su gratitud a Dios por enviar "al Papa Francisco mientras la Iglesia continúa en el Año de la Fe, y mientras enfrentamos los desafíos y oportunidades de proponer el Evangelio al mundo de hoy".
"Que Dios le de un fin fructífero a lo que tan maravillosamente ha comenzado en la selección de hoy, del Papa Francisco", concluyó.