La alcaldesa de Lima (Perú), Susana Villarán, ofreció al lobby gay aprobar la "ordenanza gay", que obligará a aceptar el "afecto homosexual" en locales comerciales y espacios públicos de Lima, así como en colegios, si salía victoriosa del proceso de revocatoria que actualmente enfrenta.
A sólo 13 días de la votación que definirá si Susana Villarán es revocada del cargo de alcaldesa de Lima, de acuerdo a la encuestadora Ipsos Perú, el 54% de limeños marcaría el "Sí" para retirarla de su cargo, mientras que el 46% optaría por el "No".
A través de su cuenta personal en la red social Facebook, la activista Lucero Cuba, de Lesbianas del Movimiento Homosexual de Lima (MHOL), reveló que en una reciente reunión de los "Jóvenes por el NO", que apoya a la alcaldesa de Lima, Villarán les ofreció que la "ordenanza gay" se aprobaría tras vencer en el proceso de revocatoria.
"(Susana Villarán) dijo que ciertamente tenía esa deuda con nuestra comunidad, y que la ordenanza se aprobaría luego de que gane el NO el 17 de marzo", escribió.
En esa ocasión, afirma Cuba, le indicó a Susana Villarán que su cumpleaños era el 23 de marzo, "entonces (Villarán) dijo 'qué regio, que ya tenía mi regalo garantizado'".
Recientemente, en un post titulado "¡Al clóset hasta la revocatoria!", el presidente del Movimiento Homosexual de Lima (MHOL), Giovanny Romero Infante, denunció que el equipo de campaña que busca evitar la revocatoria municipal le ha pedido al colectivo gay que "regresemos cómodas al clóset para salvar a la alcaldesa Susana Villarán".
Romero Infante aseguró que los partidarios de la alcaldesa de Lima "llevan décadas repitiéndonos que nos comprenden y se solidarizan, pero que primero es la revolución (o gran transformación o cambio responsable o etc.), mientras tanto, nos siguen negociando".
Sin embargo, para Sergio Burga, investigador asociado de la oficina para América Latina del Popular Research Institute (PRI), el aparente alejamiento de la alcaldesa de Lima con el colectivo de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales (LGTB) responde a un "cálculo político".
En declaraciones para ACI Prensa el 4 de marzo, Burga señaló que "para todos es conocido, que Susana Villarán se ha comprometido con muchos sectores de la izquierda radical, incluido los grupos LGTB desde su candidatura a la alcaldía".
Este apoyo, indicó, "no ha sido bien visto por la mayoría de vecinos limeños, lo que motivó su alejamiento de estos grupos por un cálculo político".
"Sin embargo miembros de su equipo edil siguieron apoyando y promoviendo eventos incluso con dinero de todos los limeños", indicó.
Burga recordó que "la denominada 'ordenanza gay' que impulsó la alcaldesa de Lima, Susana Villarán, buscaba establecer los criterios para 'promover la igualdad de género y evitar la discriminación por orientación sexual', es decir un argumento para imponer la ideología gay en esta capital, obligando a los colegios a aceptar y "tolerar cualquier 'muestra pública física de afecto' homosexual".
En 2011, Villarán abrió la llamada "Marcha del Orgullo LTGB", junto a varios miembros de su equipo edil. En 2012, su teniente alcalde, Eduardo Zegarra, partició en representación de la alcaldesa.
El investigador del PRI recordó además que Susana Villarán apoyó la realización de simbólicas "bodas" homosexuales, en las que particpó como madrina la activista lésbica Susel Paredes, que se desempeña como Subgerente Municipal de Organizaciones Vecinales.
En octubre de 2012, la Municipalidad Metropolitana de Lima co-patrocinó la campaña "Hagamos la revolución. ¡Conviértete en lesbiana", con ocasión del supuesto "mes de las rebeldías lésbicas".