Los gestos de gratitud hacia el Papa Emérito Benedicto XVI, se siguen manifestando en el mundo entero, a los que se le suma las oraciones que la Iglesia universal ofrece por los cardenales que participaran ene le próximo cónclave para elegir al nuevo Sucesor de Pedro.
El Arzobispo de La Plata (Argentina), Mons. Héctor Aguer, presidió hoy una Misa de agradecimiento por Benedicto XVI las 8:00 p.m. en la Catedral local. En ella participaron sacerdotes, comunidades religiosas, instituciones de formación y apostolado y los fieles de la arquidiócesis.
Asimismo, el Prelado hizo un llamado a unirse en oración para invocar la guía del Espíritu Santo sobre los cardenales para la elección del nuevo Papa.
El Arzobispo de Lima y Primado del Perú, Cardenal Juan Luis Cipriani Thorne, expresó que Benedicto XVI "ha conducido con sus enseñanzas magistrales, llenas de sencillez, profundidad y belleza, la nueva evangelización. Ha iluminado con la verdad las situaciones más graves que el mundo de hoy afronta".
En un suplemento publicado en El Comercio el 28 de febrero, el Purpurado expresó que "con emoción y con el afecto de buenos hijos de tan gran padre, hemos visto en estos días al Papa con una serenidad llena de paz. Con la certeza de que el camino de la fe lleva a Jesucristo".
"Los senderos de Dios son inexpugnables. Durante toda su vida Joseph Ratzinger cultivó la virtud de la humildad. Ese camino le llevó misteriosamente a la Cátedra de Pedro, que ha ejercido ocho años a la vista de un mundo tantas veces frívolo e indiferente, cuando no agresivo y autosuficiente", manifestó Cardenal Cipriani.
El Rector Mayor de los Salesianos, Padre Pascual Chávez Villanueva, también agradeció a Benedicto XVI por su ministerio: "gracias Santo Padre, regalo de Dios a su Iglesia y al mundo".
El Rector dijo al ahora Papa Emérito que "la historia mostrará su grandeza humana, su vigor intelectual, su profunda vida espiritual, su amor indiviso a Cristo, su gran servicio" y agregó que "les pido que se unan a mí en la oración ferviente, junto con María, que comparte vida y oración con los apóstoles, mientras esperamos con confianza y serenidad que Dios nos dé un nuevo pastor según su corazón".