8 de enero de 2013

Ene 8, 2013

El Arzobispo de Lima y Primado del Perú, Cardenal Juan Luis Cipriani, recordó que el papel del Obispo es conducir a las personas a Cristo y por eso a veces se tiene que manifestar públicamente en contra de las ideas relativistas que se quieren imponer en la sociedad y que van contra de Dios.

“El Obispo no puede seguir el camino más cómodo, porque siempre tiene que buscar a Cristo, la unidad con el Papa y manifestarlo con su ejemplo y con su palabra. Por eso, quien ama a Cristo, en muchos puntos no está de acuerdo con lo que se quiere imponer, olvidándose de Dios”, expresó durante la Solemnidad de la Epifanía del Señor celebrada el domingo en la catedral de Lima.

“El valor de la contradicción a esas orientaciones (relativistas) es muy importante para un Pastor de la Iglesia”, continuó.

Durante la Misa, el Purpurado señaló que este rechazo al relativismo implica también la defensa de la vida desde la concepción hasta la muerte natural y de la familia fundada en el matrimonio de un hombre y una mujer.

“En este mundo se juega con el sexo, el matrimonio, la vida humana y la familia. Y el Obispo tiene que indicar el camino, aunque no les guste a muchos, siendo fiel a las enseñanzas de Cristo y en comunión con el Santo Padre”, señaló.

El Arzobispo de Lima también exhortó a los fieles a buscar el bien, educar, acompañar y corregir. “Ser personas es ser libres. Por eso busca la verdad, usa tu inteligencia y busca el bien”, señaló.

“¿Qué características tiene la persona humana? La persona es libre en una libertad unida a la verdad. Dios no te dice ‘haz lo que quieras’, te dice ‘haz lo que debes’. Dios nos ha regalado una manera ser extraordinaria. Somos libres con una misión: tenemos la libertad para amar a los demás, trabajar, ayudar y querer a Dios”, afirmó el Cardenal.

Finalmente invitó a seguir el ejemplo de los Reyes Magos y seguir la estrella que conduce a Dios. “Y esa estrella es Cristo presente en su Iglesia de manera especial en la Eucaristía y en la Confesión”, expresó.