El Dr. José María Simón Castellví, miembro del Pontificio Consejo para los Agentes Sanitarios (Pastoral de la Salud), denunció que el Hospital San Juan de Dios de Esplugues, en Barcelona (España), especializado en niños, acogerá una jornada que promueve la eutanasia este miércoles 13 de diciembre.
El centro médico es dirigido por la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, y se encuentra bajo la jurisdicción de la diócesis de Sant Feliu, sufragánea del Arzobispado de Barcelona.
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En un folleto explicativo la asociación Derecho a Morir Dignamente, organizadora de la jornada titulada "Debate sobre el buen morir", señala que "todos tenemos derecho a una muerte digna y la ley reconoce en algunos casos el derecho a decidir. Pero qué pasa con estos grupos que no reúnen las condiciones que la ley prevé".
En declaraciones a ACI Prensa, el Dr. Simón Castellví, también presidente de la Federación Internacional de Asociaciones Médicas Católicas (FIAMC), señaló que el hecho de que "en un hospital de niños se deje actuar a la asociación española por la eutanasia (que se llama Derecho a Morir Dignamente) es una vergüenza".
Esta postura se entendería porque "desde hace demasiado tiempo, este hospital de niños tiene como asesor en bioética al Instituto Borja de Bioética", el cual hace algunos años emitió "un documento en favor de la despenalización de la eutanasia", indicó.
Para Simón Castellví, la organización de este evento en un hospital católico "se trata de una provocación a la Iglesia en toda regla, quizá para ver cómo reacciona".
"Siento mucho decir que, con estos señores a favor de la eutanasia en un hospital de niños, puedo pensar razonablemente que ya se están aplicando eutanasias en niños. ¡Me duele la Orden del gran Santo Juan!", lamentó.
La jornada contará con la presencia y participación de Francina Vila, concejala de Mujer y Derechos Civiles del Ayuntamiento de Barcelona, que respalda el evento.
El P. Custodio Ballester, párroco de la Inmaculada Concepción de Hospitalet de Llobregat en Barcelona y uno de los primeros en denunciar prácticas contra la vida en diversos hospitales vinculados a la Iglesia en Cataluña, lamentó la falta de acción del Episcopado local porque "Mons. Agustín Cortés, Obispo de San Feliu, piensa que, al ser el hospital propiedad de una orden religiosa, la cosa no va con él, aunque el derecho canónico ciertamente le autoriza a intervenir".
Si el Prelado descubre un abuso en el manejo del hospital, señaló el P. Ballester, "después de haber avisado sin resultado al Superior religioso, puede proveer personalmente con su propia autoridad, de acuerdo al canon 683, inciso 2".
El sacerdote español también indicó la responsabilidad del Hermano Jesús Etayo, "recién nombrado superior general de los Hermanos de San Juan de Dios".
"Desde 2006 y hasta su elección, ocupaba el puesto de segundo consejero del hasta ahora superior general. Por tanto, está al cabo de la calle de todo, y desde hace tiempo", indicó.
Para el P. Ballester, "seguramente el máster que realizó en el Instituto Borja de Bioética ha debilitado bastante sus criterios morales".
De acuerdo al sacerdote, una tercera responsabilidad corresponde al Arzobispo Metropolitano de la Provincia Eclesiástica de Barcelona, quien ha evitado "encarar el problema de una diócesis sufragánea".
La jornada incluirá temas como "El camino de la muerte digna en una unidad neonatal" y "La muerte en la enfermedad mental y en la discapacidad intelectual".