Jesús Aníbal Gómez Gómez, un seminarista claretiano nacido en Colombia, forma parte de los mártires de la Guerra Civil Española que será beatificado en octubre de 2013 en el país europeo.
Jesús Aníbal nació en Tarso, Antioquia, en 1914. A los 11 años viajó a Bogotá e ingresó al seminario de los claretianos. Luego se trasladó a Zipaquirá y en 1935 su superior general lo envió a España para terminar con sus estudios y ordenarse sacerdote.
En 1936 llegó a Zafra, en Extremadura, lugar que comenzó a experimentar las hostilidades de la persecución religiosa que ocurría en España.
"No tenemos huerta, y para el baño nos las arreglamos de cualquier modo (…). De paseo no hemos salido ni una sola vez desde que llegamos: de hecho guardamos clausura estrictamente papal; así nos lo exigen las circunstancias", escribió a sus padres días antes de morir.
En declaraciones a la periodista colombiana Carmen Elena Villa, el sacerdote español Vicente Pecharromán relató años atrás la atención que llamó el caso de Jesús Aníbal, pues se trató del único extranjero de los claretianos asesinado durante la Guerra Civil.
El P. Pecharromán, contó que ni su pasaporte colombiano ni la protección que ofreció la embajada de Colombia en España pudieron salvarle la vida.
En medio del conflicto, el superior de los claretianos consiguió un salvoconducto para que los jóvenes viajaran a Madrid sin inconvenientes. Sin embargo, los milicianos llegaron a la estación de Fernancaballero y tomaron el vagón donde fueron asesinando uno por uno a los seminaristas.
Al encontrarse con Jesús Aníbal le preguntaron: "¿Has venido desde tan lejos sólo para hacerte cura?" A lo que el joven de 22 años respondió "sí y a mucho honor". Después de ello fue asesinado.
Luego de la ceremonia de octubre de 2013, Jesús Aníbal será el décimo beato colombiano, junto al P. Marianito, la madre Laura Montoya y los siete mártires de la orden Hospitalaria de San Juan de Dios también asesinados en 1936 en España.