En sus palabras posteriores al rezo del Ángelus, el Papa Benedicto XVI saludó a los peregrinos de lengua española reunidos en la Plaza de San Pedro, “en particular a los miembros de la Hermandad del Señor de los Milagros de Roma”.
El Santo Padre también invitó a los fieles a intensificar sus oraciones para que el Sínodo de los Obispos sobre la Nueva Evangelización “produzca abundantes frutos en la vida de la Iglesia”.
“Encomiendo este deseo a la amorosa intercesión de María Santísima, y reitero mi exhortación a dirigirse a Ella cada día con el rezo del Santo Rosario, confiándole todas nuestras dificultades, retos y alegrías, para que los presente a su Hijo Jesucristo, luz del mundo y esperanza del hombre. Feliz Domingo”, concluyó.