La Vicaría de Familia y Vida de la Arquidiócesis de Montevideo (Uruguay), señaló que la ley del aborto aprobada por el Senado es una herida para el país, que se enorgullece de haber abolido la pena de muerte, pero que ahora condena a los no nacidos.
“Los diversos eufemismos con los que se disfraza esta ley no quitan nada a la gravedad de lo aprobado. Es un día triste para el Uruguay, un país que fue refugio de tanta gente que vino en busca de nuevas oportunidades, una sociedad donde muchos encontraron motivos para seguir viviendo, hoy niega a otros uruguayos el derecho a vivir. La ley aprobada hoy por el Senado es una herida a la nación”, afirmó en un comunicado.
Asimismo, indicó que esta ley no solo contradice la Constitución y el Pacto de San José de Costa Rica, sino que “es una agresión al ser humano más inocente, y por lo tanto a la sociedad uruguaya en su conjunto y es una ofensa a Dios Creador”.
“La Iglesia comprende el drama que muchas parejas y especialmente muchas mujeres viven frente a un embarazo no deseado, pero siempre ha entendido que esta situación desafía a los mismos involucrados, a las familias, a la sociedad civil y a las autoridades, a buscar soluciones que respeten la vida”, señaló.
En su comunicado, la Vicaría reiteró su confianza en Jesucristo y reafirmó que la Iglesia continuará “mirando con esperanza nuestro futuro, y contribuyendo a la defensa de la vida humana desde su concepción hasta su muerte natural”.